Opinión

Un Milei sádico desató la ira en La Moncloa.

 

Por  Margarita  Pécora B.  –

Una y otra vez  se nos cae la cara de vergüenza ante el mundo por las aberrantes declaraciones que hace  Javier Milei  contra  líderes internacionales. Ahora  arremetió contra el Jefe de gobierno español Pedro Sánchez y  su familia en propio suelo español,  manifestando que «Tiene la mujer corrupta y se toma cinco días para pensarlo»-.  España exige disculpas públicas a Javier Milei y advierte que podría retirar a su embajadora de la Argentina por considerar  y cito: “inaceptable que un presidente en ejercicio en visita a  España,  insulte a España y al presidente del gobierno, un hecho que  rompe con todos los usos diplomáticos y  las más elementales reglas de la  convivencia”- fin de la cita-.

Desde presidentes de Estado, hasta la máxima autoridad de la Iglesia católica a nivel mundial, el Papa Francisco,  no ha quedado  nadie a salvo de las  dolorosas ofensas de Milei, que se comporta como un sádico  disfrutando de lastimar y humillar a otros.

Una y otra vez el libertario, ignorando  en primer lugar, que es el presidente de un país de 46 millones de habitantes, y que existen reglas elementales de la diplomacia que deben ser respetadas,  cruza la línea roja,  y  con una actitud  inmadura e irresponsable, vuelve a  colocar a la Argentina en ridículo, y a perjudicar  sus relaciones internacionales,  empujando al país a un lamentable aislamiento.

La espiral  de ofensas y provocaciones ha sido una constante en las diatribas que reparte  Milei; las más altisonantes  se escucharon en enero contra China. A menos de dos días de la reunión de Diana Mondino, su ministra de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, con el embajador de Beijing, Wang We, Javier Milei volvió a compartir críticas contra la potencia asiática  que encabeza Xi JImping.  Estas manifestaciones provocaron un profundo desconcierto y el malestar en la representación de China en Argentina que lo vio sin control de lo que implica su cargo…

Un mes más tarde, en  febrero, Milei tildó al presidente de Méjico Andrés Manuel López Obrador, de “patético, lamentable e ignorante”. No conforme  con ello, arremetió contra los seguidores del partido Morena a los que de forma vulgar  y despectiva les llamó  “charros resentidos sociales”. Otra víctima de los dislates de Milei, fue Gustavo Petro, el presidente de Colombia a quien calificó de “asesino, terrorista y  comunista” durante una entrevista que concedió  a Andrés Oppenheimer por el canal  estadounidense CNN.

Pero ahí no terminó todo; porque  Milei, que durante la campaña electoral llegó a amenazar con reducir sus relaciones con Brasil y hasta con abandonar el Mercosur, metió  también la pata  insultando al presidente Luis nació Lula Da silva, del cual dijo era un “comunista  y corrupto”.

En suma en estos de seis meses de gestión, Milei  ya provocó conflictos diplomáticos con China, México, Colombia, Brasil, Chile, Ecuador y ahora con España.

Como es de notar, las continuas faltas de respeto del presidente argentino hacia otros mandatarios de diversos países del mundo, siguen una secuencia violenta y revelan la falta de preparación de  un individuo que disfruta con morbosidad su oratoria intolerante, en la que    define como zurdos, socialistas, comunistas, keynesianos, o partidarios de la defensa de un Estado que según dijo ahora en España, solo provoca  muerte.

Esta vez, como en todas las  anteriores que ha cometido graves exabruptos, Milei ha  vuelto a limpiar el piso con Diana Mondino, que nuevamente tiene que sacar la cara por él, para pedir disculpas;  solo que ahora deberá ir al Congreso de la nación, a pedido de diputados  a dar explicaciones sobre el conflicto diplomático con España,  lo cual  solicitaron los legisladores conforme a lo establecido por el Artículo 204 del Reglamento de la Cámara y en virtud de lo señalado en el Artículo 71 de la Constitución Nacional.

Pero resulta que  Milei no parece tener la más mínima intención de disculparse con el Presidente de España, porque, envalentonado por las arengas de  sus amigos de la ultraderecha de VOX, que le  llenaron un  auditorio de aplaudidores, ya salió a rematar  a Sánchez  por la red X, con la peyorativa frase: “El tiro por la culata”.

De este modo,  Milei  redobla  su apuesta  y  se  ríe  también  de las críticas que  publicó en su contra,  el Alto Representante para Política Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell de que ”Los ataques contra familiares de líderes políticos no tienen cabida en nuestra cultura: los condenamos y rechazamos, especialmente cuando provienen de nuestros socios”. Esto  escribió el jefe de la diplomacia europea en un mensaje publicado en X.

¿Cuál será la próxima víctima  de los ataques de Javier Milei? Puede ser  cualquier otro presidente, que no comulgue con sus ideas de ultraderecha, porque  su intolerancia es enfermiza. Milei no  tiene formación política y mucho menos diplomática,  no sabe respetar las ideas diferentes que no coincidan con las suyas,  y no es capaz de expresar su  punto de vista sin herir los sentimientos de los demás, y por esto termina   burlándose.   Por ese camino torcido, lamentablemente  está llevando al aislamiento  diplomático de la Argentina,  en un momento en el que  nos debe encontrar más unidos  que nunca,  para transitar el sendero de la recuperación económica y la cooperación internacional.

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