La cumbre Celac-UE difunde una declaración
El encuentro tiene lugar en medio del mayor despliegue militar estadounidense en el Caribe en más de tres décadas, bajo el alegato declarado de luchar contra los cárteles del narcotráfico.

El encuentro tiene lugar en medio del mayor despliegue militar estadounidense en el Caribe en más de tres décadas, bajo el alegato declarado de luchar contra los cárteles del narcotráfico, así como entre bombardeos de Washington contra presuntas lanchas con drogas en el mar Caribe y el océano Pacífico que han dejado decenas de muertos. Esta conducta ha sido calificada por Venezuela de «amenaza» y «agresión«, y cuestionada por otros líderes, como el anfitrión, Gustavo Petro, su par brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y el papa León XIV.
En el documento, los líderes destacan su «compromiso inquebrantable con la democracia, incluidas elecciones libres, inclusivas, transparentes y creíbles». Asimismo, reafirman su adhesión «a los principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas, en particular la igualdad soberana de los Estados, el respeto a la integridad territorial y de la independencia política».
Cooperación internacional
«Reiteramos nuestra oposición a la amenaza o al uso de la fuerza y subrayamos la importancia de priorizar la prevención de los conflictos, las operaciones de mantenimiento de la paz y la consolidación de la paz como elementos esenciales para una paz duradera en ambas regiones», reza el texto acordado.
Al mismo tiempo, recuerdan que la Celac ha sido declarada Zona de Paz «comprometida con la solución de controversias mediante el diálogo y la cooperación». «Abordamos la importancia de la seguridad marítima y de la estabilidad regional en el Caribe«, destaca el texto, que incide en la importancia de «la cooperación internacional, incluso en la lucha contra el crimen organizado transnacional y el tráfico ilícito de drogas».
En ese sentido, el texto señala la posición nacional de varios Estados respecto a la situación actual del Caribe y el Pacífico, si bien especifica que Argentina, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Panamá, Paraguay y Trinidad y Tobago se deslligan de este punto.
Priorizar soluciones pacíficas mediante la diplomacia
También se menciona la preocupación multilateral por el «creciente número de guerras y conflictos en el mundo», al tiempo que se insiste en la necesidad urgente de priorizar soluciones pacíficas de controversias mediante diplomacia y diálogo conforme al derecho internacional, en especial la Carta de las Naciones Unidas. «Expresamos la necesidad de garantizar la protección de la población civil y la prestación de asistencia humanitaria», agrega el texto.
Sobre el conflicto entre Rusia y Ucrania, el documento destaca su apoyo a «los esfuerzos encaminados a lograr un alto el fuego sostenible y a promover el diálogo político orientado a una paz justa, integral y duradera».
Además, se reconoce la necesidad de «preservar la neutralidad del Canal de Panamá para la paz y la estabilidad mundiales, el comercio y la cooperación».
Cambio del sistema internacional
La declaración también aboga por un cambio del sistema internacional en apoyo a una reforma integral del Consejo de Seguridad de la ONU «para hacerlo más representativo, inclusivo y democrático«, de tal forma que «refleje mejor las realidades actuales». En este contexto, se hace una invitación a todos los Estados miembros del sistema de la ONU «a participar y a respaldar la aplicación del Pacto por el Futuro».
«Nos comprometemos a fortalecer nuestra cooperación birregional y aunar esfuerzos para apoyar al secretario general en sus iniciativas para revitalizar el multilateralismo«, destacan.
Por su parte, Venezuela se ha retirado de la declaración.






