GRACIELA LOIS: “Victoria Villarruel no es negacionista, es reivindicadora de la dictadura”
Por Rodrigo Marcogliese –
Justo cuando se conmemora el Día nacional del Detenido Desaparecido la vicepresidenta de la nación Victoria Villarruel organizó un acto en el Senado para conmemorar a las «víctimas del terrorismo». Durante el evento, anunció que impulsará la reapertura de todas las causas relacionadas con crímenes cometidos por grupos civiles en la década del 70. Villarruel destacó la importancia de este homenaje y criticó al kirchnerismo por, según ella, haber protegido a los responsables de estos crímenes. Comunas dialogó con Graciela Lois, esposa de Ricardo secuestrado en 1976 y llevado a la Esma.
Un recuerdo de Ricardo en esta fecha.
Se lo recuerda siempre, pero como una figura militante, obviamente. Fue muy poco el tiempo que estuvimos juntos (estuvimos un año y medio casados nada más), ya tenía dos meses y medio mi hija cuando a él se lo llevan, así que es más el tiempo de separación, el que no vivimos que el que pudimos compartir en militancia y en estudios y proyectos.
¿Cómo era él, como podrías describirlo?
Uno siempre idealiza. Pero yo lo conocí en la Facultad después de haber caído preso en una protesta universitaria donde estuvimos y justamente se cumplieron ahora 50 años. Caímos presos el 21 de agosto del 74. Por esa razón lo conocí. El cursaba más adelante que yo, cuando yo todavía estaba en la mitad de la carrera. Era un tipo absolutamente humilde, muy trabajador, muy consciente de lo que hacía: trabajaba, estudiaba y mantenía a su familia. Desde los 8 años jugaba al rugby y tuvo que dejarlo a los 22 porque ya no podía con su tiempo, su estudio y su trabajo.
En el momento que yo lo conozco él trabajaba en lo de su papá, que trabajaba para una empresa en Núñez que era de mantenimiento de ascensores y el por la mañana iba a hacer ese trabajo con el mono lleno de grasa y a la tarde iba a Arquitectura. Ese era él.
En este año tan particular ¿cuál es tu reflexión acerca de la batalla cultural que piensan dar desde el Ejecutivo?
Creo que la batalla esa es de ignorantes, para mí Victoria Villarruel no es negacionista, es reivindicadora de la dictadura y de los juzgados por delitos de lesa humanidad.
Milei, para mí es un ignorante, payaso. Lamento pero tengo que ser sincera y justamente por ignorancia, por desidia o lo que sea, la gente lo votó. Hoy creo que con lo que se está viendo, más allá de lo que a nosotros nos corresponde por Derechos Humanos, creo que a toda la población que está sufriendo ese voto y algunos que todavía dicen “bueno, hay que esperar…hay que ver”, cuando están sometidos a la indigencia ya. Porque vemos a los jubilados, a los empleados del Estado echados, vemos las facturas de las empresas del Estado que se triplican y quintuplican, y no hay justificación para eso.
En cuanto al tema que nos atañe, el negacionismo para mí es reivindicación. El tema de los diputados que fueron a visitar (a la cárcel), y que después hacen todo este circo de que no sabían –“pobrecitos los octogenarios”, pero estos octogenarios fueron juzgados con el debido proceso tuvieron todas las garantías que no tuvieron los nuestros.
Yo cuando iba a hacer las denuncias, me acuerdo que en un Amparo, en una presentación judicial que hicimos ante un Juzgado por la Morgue judicial, cuando el Juez me interroga a mi le dije: Mire, yo voy a estar, aunque tenga que ir con bastón, voy a seguir preguntando donde está (Ricardo), y que me lo digan, y lo voy a seguir buscando. No me voy a quedar en mi casa. Y esto es lo que estamos haciendo.
El punto es que esta gente nunca dijo nada, siempre se calló, y hoy una Victoria Villarruel habla de querer juzgar a los montoneros. ¡A quién queres juzgar Villarruel, si a esos que vos querès juzgar, los hicieron desaparecer tus amigos que hoy estas reivindicando! Preguntale a ellos dónde están, y si después si querés los podes juzgar.
Yo se lo decía al Juez, yo quiero, si mi marido hizo algo, mató a alguien o tuvo alguna acción que mereciera juzgamiento, quiero que se lo juzgue. Si ustedes lo condenan a muerte yo lo tengo que saber, él tiene que ser juzgado. Cosa que nunca hicieron.
Nosotros éramos estudiantes, activistas en la Facultad, bien visibles. Bueno cuál era el crimen en eso? teníamos un proyecto de vida para nosotros y para los demás que no entendían estos milicos.
¿Cómo transitaste la dictadura con la nena chiquita como familiar de desaparecido?
Tal como te dije Familiares se forma en el año 76, es decir es anterior a Madres y a Abuelas y lo forman matrimonios. Nosotros tuvimos la suerte que la Argentina prestara un espacio físico y eso ayudo a que pudiéramos juntar más gente.
Yo aparecí en diciembre en Familiares, ahí en la Liga, y desde ese momento me pidieron que me quedara porque venía de una militancia, en fin éramos tres personas más jóvenes y nos dedicamos después permanentemente a tomar las denuncias.
En el momento que lo llevan a él, por Belgrano. Yo tenía que ir con él pero como ese día hizo un calor anormal me quedé en la casa de una tía con mi hija porque estaba muy molesta. Y desde ese momento que él no volvió, yo busqué, porque es lo que nos pasa a todos , buscamos excusas que si le habrá pasado esto o aquello, pasa la noche, me quedé en lo de mi tía, no volví a mi casa , porque empecé a pensar: tengo que ir a hacer la denuncia. Y fui a hacerla a la Comisaria en Belgrano y obviamente no me dejaron pasar, no la pude hacer, pero después empecé a recapitular y darme cuenta que no podía seguir haciendo cosas casi normales.
Por suerte vino una amiga de mi suegra, me ayudó bastante, iba a buscarme cosas a mi casa porque yo no podía volver a la casa donde estaba viviendo en Mataderos, no tenía pañales para mi hija. La verdad es muy difícil el primer tiempo, y además con una criatura. Hubo momentos en que tenía que quedarme arriba de un colectivo dando vueltas porque no tenía adonde ir, hasta que finalmente le hablé a mi mama, le pedí que viniera a buscar a mi hija y se la llevó porque yo no podía con una criatura de casi tres meses dando vueltas por la calle porque no tenía adonde ir, por empezar porque podía comprometer a los que me dieron alojamiento.
Finalmente volví a mi casa (de mis padres) con todo el riesgo que eso suponía. Durante mucho tiempo hubo un auto estacionado en la esquina. Yo no salía, no asomaba ni la nariz. No fui más a la Facultad, obviamente. Fue muy difícil. Por eso fui en diciembre a Familiares para conectarme con mis compañeros de la Facultad y logre conectarme con una familia cuyo hijo había desaparecido junto con mi marido. Ahí es donde fui a Familiares y empecé mi lucha porque dije. Dejo militancia dentro de la Facultad, y me dedico a Familiares, todos los días iba a Familiares hasta que conseguí un trabajo en un Estudio jurídico con el hermano de un desaparecido con lo cual mi mundo fue ese.
Me perdí la infancia de mi hija, pero siempre pensé que ella no me lo iba a reprochar porque lo hacía por buscar a su padre. No me lo reprocho, por el contrario dijo sentirse orgullosa. Y ella estudio Antropología forense ye estuvo un tiempo en el Equipo y su vida es eso también. Pero es muy difícil porque uno al desaparecido lo tiene siempre presente.
Hoy mis nietos piensan en su abuelo que nunca conocieron pero a nosotros nos modificó la vida y no vivimos la vida que teníamos pensada hoy a veces lo hablo con mis compañeros de trabajo que vivo con mis nietos lo que no pude vivir con mi hija. Mi madre fue una gran ayuda,
¿Cuál es la diferencia a que notas entre los conceptos de negacionista y de reivindicadora?
Negar es ignorar tal vez o pensar que es una historia, y reivindicar es lo que hace ella (Villarruel) considerar héroes a los pobrecitos octogenarios. Y hay un proyecto mucho más amplio que pedir la libertad. Ver que Astiz y Acosta siguen teniendo réditos de cuentas en el exterior de todo los beneficios que les sumó haber sido quienes fueron en la ESMA: La reivindicación es decir que hay una justicia juzgando a quienes no fueron juzgados.
Está mintiendo porque en su momento hubo juzgamientos, pero no se puede comparar con el terrorismo del Estado. El Estado debe proteger al ciudadano, no hacerlo desaparecer y matarlo. –concluyó Graciela Lois.