WALTER PEÑA: Donde la solidaridad está a flor de piel.

Por Matías Benítez .-
Dueño de un curriculum voluminoso, Walter Peña es actor, escritor, y militante en los barrios. De ese territorio que él ubica “donde la solidaridad está a flor de piel”, nació justamente su producción audiovisual luego convertida en una obra literaria de gran valor para la memoria colectiva, que tituló “Ser esencial”. Los detalles los compartió con Comunas.
Acabas de sacar una obra que fue presentada en la Feria del Libro con historias de distintos barrios. Contame de qué se trata este “Ser esencial”.
Nació primero como una serie televisiva por la TV pública en el año 2020 a partir del trabajo que veníamos realizando con el Padre Pepe Di Paola, con los Curas villeros, de colaborar un poco en los barrios en ese tiempo, que nos parece tan lejano y fue hace muy poquito de pandemia que sufrimos todos. Fue producir como un registro. Se hablaba mucho de los esenciales en ese año, y nosotros lo que veíamos es que había esenciales en los barrios y en las villas, que estaban invisibilizados. A partir de ahí se pensó un proyecto televisivo para poder visibilizar el trabajo de muchos /as vecinos y vecinas de los barrios o instituciones que ayudaban y daban su solidaridad por el otro u otra que estaba necesitándola en ese tiempo.
Se hizo una primer temporada, y ya llevamos la tercer temporada televisiva. Luego se transformó en un libro que quedó como Registro único desde el material audiovisual al literario, de trasladar estas historias al papel, el Ministerio de Educación de la Nación también lo tomó como un Registro casi histórico porque en ese tiempo mucha gente no podía circular y quedó como un material de lo que sucedía realmente en estos territorios.
El libro cuenta las historias de estos seres esenciales o instituciones esenciales que estuvieron ahí manteniendo ese reservorio de humanidad que hay en nuestros barrios, villas donde la solidaridad está a flor de piel todo el tiempo y muchas veces se lo cuenta desde otro lugar, ciertos medios que lo único donde ponen el foco es en aspectos negativos y se olvidan de la cantidad de gente que está tratando de cuidar la vida todos los días.
Al pedirle que cuente alguna de esas historias, el autor de “Ser esencial”, se refirió al capítulo I del libro que a la vez lo fue de la Serie llamado “espíritu de lucha”.
Cuenta la historia de un Comedor saludable. Está en la Villa 21 en Barracas y lo que hicieron una asociación de vecino, fue juntarse y armar un comedor para los vecinos/as que tenían problemas económicos. Y no solo un comedor para un guiso, sino saludable, tratando de cuidar al vecino que necesita un plato de comida teniendo en cuenta el problema de salud que tienen por ejemplo los hipertensos, celiacos, diabéticos, etc.
La vida la cuidan en su totalidad, no solo por darles de comer, sino el tipo de comida que le dan. Esto me parece que es un diferencial para contar, por ejemplo, y ellos estuvieron trabajando en plena pandemia, nunca pararon, se terminaron contagiando todos los colaboradores, armaron distintos equipos. Algunos pasaron situaciones muy complicadas, pero después volvieron a sus vecinos /as.
Todo esto te lo cuento en momento de suma incertidumbre (meses mayo-agosto) donde la vacuna todavía no estaba disponible y la gente que estaba poniendo su cuerpo a disposición tratando de ayudar al otro, tomando todos los recaudos posibles, pero con mucha preocupación también de lo que podía pasar.
Otros capítulos tienen que ver con conversión de vida, como la historia de un joven-Santiago Chotsourian, que fue director de orquesta del teatro Colón, premio Konex de música, decide irse a vivir en una villa, transformar su vida, estudiar enfermería y trabajar en ayuda como enfermero en el barrio en José León Suárez. Es decir alguien que no es del barrio y decide irse al barrio para ayudar.
Según Peña Son 13 capítulos. “Tratamos de contar la historia, en todo caso el conflicto, porque el problema está muchas veces en el que lo mira y dice ¿qué estoy haciendo con mi vida? cuando veo como otros deciden compartir su vida de otra manera o ponerla a disposición. No sé si nos acordamos pero en esos años una persona de clase media se enfermaba de Covid y si vivía en un edificio casi que le prohibían la entrada al mismo. En los barrios populares, un vecino /a se contagiaba de Covid y había cinco vecinos viendo cómo le alcanzaban la comida. Es otra la mirada.
Esta experiencia extrema de vida que nos tocó en la pandemia, ¿finalmente cambio algunas cosas?
Yo creo que sí, soy un creyente de esas esperanzas. En alguno de estos barrios sí se afianzaron mucho las comunidades organizadas y eso sirvió para afianzar y hoy día están mucho más a partir de lo que sucedió con la pandemia. Creo que cada tanto tenemos que volver a esta memoria. Tratemos de no olvidarnos de lo que sucedió, de ser solidarios, cuidar la vida, entender que eso es lo principal.
La mirada de la Iglesia es del prójimo…
Sí ese es el objetivo, que el otro soy yo también, entonces siempre que estoy cuidando al otro también me estoy cuidando yo, y la pandemia tuvo algo muy distintivo, y es que es importante que nos cuidemos todos. La frase del Papa “nadie se salva solo”, es fundamental.
Estamos estrenando el lunes 15 en Canal Encuentro un ciclo nuevo, que se llama “Desde el techo sagrado de las periferias”. Contamos en cuatro capítulos de las 3 T, (tierra techo, trabajo) y la comunidad. Uno está todo el tiempo dentro de los barrios tratando de mostrar esos proyectos que le dan sentido a la vida-concluyó Walter Peña-.