LA TORMENTA PERFECTA.
Por Garcilazo.
Estamos viviendo un mundo multipolar, si los estallidos sociales pudiéramos corporizarlos e imaginarlos como una persona que viaja en un avión, no sabríamos en qué lugar aterrizaría primero, si en una Europa que se encamina a la derecha, con el peligro de Marine Le PEN en Francia, DÍAZ AYUSO en Madrid, o el banquero Mario DRAGHI en Italia, o en una América Latina donde los pueblos se levantan contra gobiernos opresores colonizados por EE UU, como CHILE y COLOMBIA, o la posibilidad cierta que despierte PERÚ en contra su tradicional liberalismo y que el año que viene pueda volver LULA en un BRASIL diezmado.
A nivel mundial no hay nada planificado ni podría haberlo, sí sabemos que RUSIA y CHINA se consolidan es sus posiciones económicas, militares, científicas y cibernéticas, mientras que la hasta hoy primera potencia tiene que hacer equilibrio entre sus reclamos internos y sus compromisos internacionales.
Fuera de ese mosaico está La ARGENTINA, con una altísima inflación ya desterrada en el mundo entero, con una tremenda capacidad ociosa en su pequeña industria, con un alto grado de desocupación, con crisis alimentarias incomprensibles para el autodenominado granero del mundo, con un gobierno honesto bombardeado desde distintos frentes económicos, financieros, políticos, judiciales y periodísticos, con total apertura de opinión pública a pesar que los medios hegemónicos lo califiquen como autoritario, en fin, un combo infernal para generar la tormenta perfecta que siempre está al acecho. Para colmo de males la pandemia y su segunda ola no da respiros, propiciada por una oposición que se resiste al cuidado personal y colectivo ya se superamos los 500 fallecidos por día, con lo que terminaremos siendo uno de los países con mayor porcentual de víctimas en relación a su población. Hasta aquí el relato de los hechos que no difiere, con sus más y sus menos, a lo que cualquier observador percibe de la realidad argentina a la fecha.
No existe otra salida que un volantazo a todo este atropello que se propone como una verdadera máquina de impedir para hacer fracasar a este gobierno. La derecha siempre invoca «la democracia» como si la hubiese inventado, cuando que en el poder gobiernan como déspotas, atacan con violencia y ya desplazados se defienden como republicanos. Es hora de ponerle fin a este abuso, debemos dejar de ser contemplativos, colaborar y militar constantemente y así escapar de esta trampa criminal tendida por los inescrupulosos de siempre, considerando que el mundo está ocupado en otras cosas y con sus propios problemas, debemos entender que éste es el momento, sin olvidarnos que en poco tiempo habrá elecciones de medio término que se deben ganar para afianzar el poder. Necesitamos cambiar las formas de hacer política, informar todo lo que se hizo que no es poco, ilustrar a una población adormecida con mentiras y noticias inventadas.
Sin apartarnos del sistema democrático se deben articular todos los medios de defensa que están vigentes en nuestra legislación, con rápidas intervenciones a como dé lugar, porque aunque la derecha sepa que no habrá de volver, por lo menos con estos personajes gastados y esperemos prontamente procesados, su misión primigenia es destruir a los movimientos nacionales y populares, que aún con falencias menores fácilmente corregibles, es el único norte posible.
