SERGIO BURSTEIN: Golpeando sin cesar las barreras de la impunidad.

El judío-argentino Sergio Burstein, quien sigue reclamando a viva voz y buscando justicia, como parte integrante de los familiares de las víctima del atentado a la AMIA, conmemorado hoy los 25 años de aquel hecho, expresó con claridad su sentimiento de permanente dolor por la impunidad y estigmatización. “Yo no me siento un ciudadano libre”- manifestó- y en esto denuncio a este gobierno y a los dirigentes comunitarios que son socios en esto de seguir estigmatizando al ciudadano argentino- judío”. En esa misma línea, Burstein criticó duramente el Decreto de Macri contra Hezbollah.
Por Laura Donofrio
En un día muy especial, recordé dos preceptos básicos del ser judío que vos representas muy bien, y uno es: No callarás, y el otro es, Justicia buscarás. En 25 años del atentado a la AMIA, la Mutual israelita argentina, nunca te callaste ni dejaste de buscar justicia ¿Qué te dejan estos 25 años de lucha?
Lo que vos estás mencionando honestamente no conozco tanto, sé que es ser judío, me encontré como tal, cuando estuve en Israel y puse esos famosos papelitos en el Muro de los Lamentos en el cual me conmocioné y me puse a llorar. Desde lo más profundamente me dije: soy orgullosamente judío, encontré mis orígenes, pero no conozco profundamente todos los preceptos del judaísmo, pero en un día en la AMIA, en un acto el gran rabino por entonces, Benhamu, un amigo, se refirió a mí por algo que yo había dicho y dijo que “si hay alguien que representa el ser judío se llama Sergio Burstein, porque no se calla, porque los preceptos representados en Sergio Burstein están en que él no se calla, a él no le importan los nombres, de quien habla. Lo que puede esbozar con su voz lo grita a los cuatro vientos y eso es lo que debe hacer un judío, no callar, no ser cómplice con el silencio, y eso es lo que hace Sergio Burstein”.
Hoy me lo estás diciendo nuevamente y la verdad que me sentí tan abrazado y reconocido orgullosamente judío, y argentino para quienes están escuchando, porque una cosa con otra no tiene nada que ver, que al ser judío, dejo de ser argentino, al contrario, muy argentino, tengo una abuela argentina, este es el país que defenderé con uñas y dientes, y lo estamos haciendo los familiares, en la pelea que damos en este día y todos los días que son 18 de julio, porque para nosotros hace 25 años todos los días es el atentado a la AMIA, el solo hecho de luchar por verdad y justicia ya es directa o indirectamente luchar por un país mejor en donde no nos quiebre el brazo la impunidad.
Nosotros de pie vamos a hacer todo lo posible para echar por tierra la impunidad y la corrupción, y que florezca por siempre la verdad verdadera para tener justicia, devolverle la dignidad a los muertos, para que nosotros tengamos dignidad como pueblo, como sociedad. Y ese día la Argentina va a ser mejor, esa es una forma en la cual uno se siente plenamente satisfecho y pleno de fuerzas porque no es solamente para uno que lo hace, es para todos nosotros para que seamos un país con mayúscula con justicia. No como vivimos hoy en una supuesta democracia deteriorada, devaluada, en donde los intereses de ciertos jueces o de la justicia, lo único que rescatamos y pudimos lograr, es demostrar a estos 25 años que aquí hubo un encubrimiento y terminaron siendo condenados el juez, los fiscales, el jefe de inteligencia en febrero último pasado, es decir que no estábamos equivocados.
¿Hasta hoy lo único que se sabe es que hubo una cobertura realmente impermeable para que la verdad no saliera a la luz?
Sin dudas. Y lo demostramos, en lo personal eso me dio una satisfacción pero no por las condenas que si quieren las podemos cuestionar porque me parecen bastante exiguas, pero no va a haber condena para aquellos que no quieren que sepamos la verdad suficiente. Por más años que les den, uno nunca va a estar conforme porque no se mide en años la responsabilidad, se mide lo que nos generó, la impotencia el dolor, el ver cómo se le faltó el respeto y se le sigue faltando el respeto a los muertos, a todos, pero sí orgullosamente porque pudimos demostrarlo.
Como he dicho en febrero, me siento pleno porque más allá de las condenas eso me permite poder mirar a los ojos a mis hijos y decirles: ¡vieron que no soy el boludo que ustedes pensaban! Porque muchas veces me reclamaban para qué tanto esfuerzo y tanta dedicación, tanto tiempo que al final iba a ser tiempo perdido porque aquí no se puede avanzar en la Argentina, donde es imposible que la verdad salga a la luz o condenar a nadie que tenga poder.
25 años de lucha ¿esto va a seguir así?
Sin duda. Hoy decía y no sé qué me pasa en determinados momentos en que uno empieza a razonar, tantas notas, reportajes te llevan por caminos que uno no imagina, y hoy decía cómo no seguir, si no seguimos, pero en lo personal quizás no pueda conseguir lo que tanto ansío: sentirme un ciudadano libre, que no está estigmatizado por el hecho ser judío de religión, porque me han quitado, como dijo Maradona: “me cortaron los pies”.
Por qué no puedo vivir en libertad, por qué vivir dentro de guetos, por qué me encierran como judío con tambores llenos de cemento, murallas, palos, hierros, cadenas, prohibidos de estacionar, arcos detectores de metales, cacheos, haciéndote sentir como que sos un delincuente, un terrorista, por qué tengo que vivir así.
Por eso lucho porque el hecho de golpear esta barrera de impunidad nos va a permitir denunciar a cada uno de ellos. Y en esto denuncio a este gobierno y a los dirigentes comunitarios que son socios en esto de seguir estigmatizando al ciudadano argentino judío y victimizándose día a día, permitiendo que esas murallas sigan estando donde están, sin tirarlas abajo, porque si esta es la única seguridad que me da el Estado, es una vergüenza. Esto es un Estado ausente, y una justicia ausente de un compromiso con la verdad verdadera, y un compromiso para que surja toda la verdad y poder vivir en paz y libres.
Sobre la estigmatización, y en particular el decreto del presidente Mauricio Macri proclamando que la agrupación Hezbollah, es terrorista, poniendo bajo sospecha a todos los hermanos musulmanes que viven en paz hace décadas en la Argentina. ¿Es doloroso también?
Hay un dato: la esposa del presidente (Awada de apellido) tiene muchos de sus parientes que viven en el Líbano. Curiosamente pertenecen al Hezbollah… es decir este ignorante puso sobre sospechas. No solamente decretó que su padre era un delincuente y su hermano y su primo, es decir que esa fortuna es mal habida, porque es producto de la corrupción, sino que ahora también dice que los parientes de su mujer son terroristas.
Él lo único que hizo fue firmar. Es mentira que se dedicaron permanentemente a poder establecer y escribir este Decreto. Se lo dieron escrito, provino de una asociación entre el gobierno israelí y el de Estados Unidos. Este hombre lo único que hizo fue firmar lo que le piden sus mandantes. Y yo le pregunto ¿Dónde están las pruebas contra Hezbollah en la causa?
Una sola prueba judiciable que justifique lo que han hecho, porque si esto es para avanzar, en dónde está la prueba, quién dice que fue Hezbollah: solo Israel y EE.UU. con los informes de Inteligencia que nunca se pudieron transformar en pruebas. Otra parodia, más humo y humillación y grieta entre compatriotas que profesan la religión musulmana, que son mucho más argentinos que cualquiera de nosotros que siempre convivimos en paz y hoy como ellos me han dicho el abogado de la CORREPI, defensor de los hermanos Salomón y tantos otros de la comunidad: “Sergio gracias por tus palabras. Nosotros no somos eso”.- Y ya lo sé. Los transformaron en eso. Tengo algunas amigas musulmanas y uno ve cuando pasan con sus atuendos, cómo las miran con desconfianza y con miedo.
Ser musulmán hoy más que nunca es estar estigmatizado, como ser terrorista. Pero terrorista es Wiñazki, son los periodista que hoy mintieron en Clarín diciendo barbaridades y mentiras con nada que está probado, eso terrorismo mediático, eso es llenarle la cabeza a la gente mintiéndole.
Majul es un terrorista, ¿no? Feimnann es un terrorista.
Eso es terrorismo mediático, porque terrorismo no es solamente meter bombas, es mentir, engañar usar a los muertos generar caos, terror, llenar de miedo a la gente, hacer que desconfíe del vecino del que profesa la religión musulmana, sembrar la desconfianza señalando a familiares, o como en mi caso “que yo soy traidor a mis orígenes porque digo lo que digo respecto de la investigación o de las instituciones”.
Ni más ni menos. Quién paga la vida de Héctor Timerman, quién se va a hacer cargo de todo lo que le hicieron padecer.
¿Héctor Timerman fue asesinado por este gobierno?
La responsabilidad por la muerte recae sobre los hombros del sicario judicial Bonadío, AMIA, DAIA, medios hegemónicos y sobre todos que los que los señalaron como una persona que encubrió el atentado a la AMIA que llevó adelante el Memorándum. Le sacaron el mejor minuto de vida cuando Bonadío le decretó prisión domiciliaria y no le permitió seguir su tratamiento que había llevado en EE.-UU y que Héctor permanente viajaba porque eso le daba vida que necesitaba como me decía tantas veces: “Sergio, quiero vivir hasta poder estar presente en el juicio para poder demostrar que soy inocente, que no hay nada, todo prensa, mentira, no por mí, sino por mis nietas.” El abuelo lo único que hizo fue entregar su vida por las víctimas de la AMIA, por intentar destrabar la causa. A lo mejor no fue la medida correcta, o fue una herramienta política que necesitaba ser pulida un poco más, pero la intención era, la que no tienen estos, que ahora pretenden llevar un juicio en ausencia, lanzar por Decreto sin siquiera ser tratado en el Senado, casi nos pone en pie de guerra con el Líbano decretando que Hezbollah, integrante del gobierno libanés que tiene ministerios a su cargo, representantes en el Parlamento, es casi decretar un estado de guerra, meternos en un conflicto que no es nuestro y que ni siquiera pidió que se vote en el Senado ni en la Cámara. No estamos para nada en condiciones de enfrentar eso, dijo finalmente Sergio Burstein. “juegan con la vida, la verdad para satisfacer a sus mandantes Israel y EE.UU”.
“Les puedo asegurar que al impresentable de Mauricio Macri, lo que menos les importa son las víctimas de la AMIA-. Solo le interesa cómo puede seguir lucrando políticamente conformando la necesidad que tienen otros países de jugar y utilizar el atentado de la AMIA para su propio beneficio. “-concluyó Sergio Burstein.