Señal de que soplan buenos aires para la Patria Grande
Por Margarita Pécora. –
Hay que saber leer las señales, y lo que están lanzando son buenos augurios para recuperar la integración regional de La Patria Grande, que fuera desarticulada por el avance del neoliberalismo a manos de los lacayos al servicio del imperialismo norteamericano. Ahora soplan buenos vientos; al menos a eso apunta la contundente victoria del MAS en Bolivia, y la significativa presencia que tuvo el presidente Alberto Fernández y su canciller Felipe Solá, en la ceremonia de asunción del nuevo mandatario boliviano Luis Arce y su vicepresidente David Choquehuanca.
Son buenos indicios también, la reunión bilateral que sostuvo Alberto con su par boliviano luego de asistir al acto de toma de posesión, y el almuerzo ofrecido por Arce a los Jefes de Estado y de Gobierno en la sede del poder ejecutivo nacional del país vecino.
Bastó un año de insistente trabajo y unidad de las fuerzas políticas del MAS, para decidir democráticamente en las urnas, la salida del gobierno de facto que encabezó Jeanine Añez y que no solo dirigió una política agresiva de persecución contra el ex mandatario Evo Morales, sino que volcó su odio de clases contra los indígenas de su país, que ayer vimos desfilar por las calles de la nación del altiplano con los rostros encendidos por la alegría y la esperanza de recuperar la dignidad y los logros que en corto tiempo les fueron arrebatados.
Evo Morales regresa a Bolivia luego de permanecer como refugiado político en la Argentina, y no pudo menos que encontrarse en Salvador de Jujuy con otra perseguida política y detenida desde el 2016, Milagro Sala, referente de la Túpac Amaru y de un pueblo originario que ha sido testigo de su resistencia.
Evo y su ex vicepresidente Alvaro García Linera llegaron hasta allí seguidos por una multitud expectante, que respaldó los cánticos exigiendo la libertad para Milagro Sala.”Gracias por tu apoyo y solidaridad, tarde o temprano llega la justicia. Mucha fuerza, hermana Milagro. Estamos contigo”, fueron las palabras que pronunció Evo mientras se fundía en un abrazo con Milagro Sala.
Y llegó también, el momento que todos esperaban. La despedida de Alberto Fernández, a Evo Morales, junto al agradecimiento del líder cocalero y ex presidente boliviano por haberle salvado la vida.
Fernández celebró encontrarse en La Quiaca, Jujuy para garantizar que Evo regrese a su patria “de la que nunca debió haber salido, ni ser maltratado como lo fue”- dijo el mandatario argentino al despedir a Evo.
“El pueblo no se equivoca y ha ido a las urnas a reivindicar el proyecto que Evo representa “- ha dicho Fernández.
Varias agencias confirman que Evo integra una caravana de dos días que arribará el miércoles al Trópico de Cochabamba, su tierra natal .
