MATIAS BARROETAVEÑA: La victimización como estrategia para evadir la discusión del traspaso

Por Gabriel Russo.
Previo a la reunión que sostendrán funcionarios de Nación y CABA para discutir el traspaso del control de 32 líneas de colectivos al gobierno de la Ciudad, Comunas dialoga con el legislador porteño del FdT, Matías Barroetaveña quien analiza la reacción evasiva del gobierno de Rodríguez Larreta frente a la discusión del tema, y considera que la victimización es usada por éste de forma constante.
¿Qué pasa con el traspaso de los colectivos a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires?
Hay diferentes formas de encarar esta discusión. Lo concreto lo vamos a saber en estos días en la Mesa con los funcionarios que tienen la información desde el gobierno nacional y los de la Ciudad para ver cómo va terminar.
Una de las formas de encarar es la cuestión de los recursos, la autonomía. Si bien la CABA tiene suficientes recursos para hacerse cargo o no, como se dieron las discusiones en estos años, como fue en el macrismo esto de regular los fondos hacia la Ciudad, de otro lado la estrategia de Larreta es permanentemente recostarse del presupuesto nacional, por ejemplo, desfinanciando totalmente “Ciudadanía Porteña” que fue una política que armó Telerman. Cuando nace la Asignación por Hijo, desfinancian uno para financiar la otra.
Por otro lado, tiene el tema de la autonomía. Estamos en una región metropolitana, hay una autoridad metropolitana que no ha funcionado y sí tenemos una realidad. Es que Nación hace una corrección, justamente por haber sido la Capital Federal. Espero que esa discusión sea un poco más sensata.
¿Vos decís que Larreta se victimiza para no discutir el tema?
Es evidente que la estrategia ha sido esa. Hacen discursos; cuando presentaron el Presupuesto inventaron el impuesto al consumo de la Tarjeta de Crédito, indexan el ABL, las patentes aumentan, después se ponen a vender tierras públicas y salen diciendo que necesitan recursos. La verdad que en un país con tantas necesidades los sistemas impositivos, la coparticipación y demás tienen que ver con redistribuir y tener sistemas que no son compensatorios, no es que cada uno recibe lo que pagó -aclara el legislador-.
Hay una falta de solidaridad en el sentido de entender lo que se le quitó de forma irregular a las provincias con el gobierno de Macri, o lo que se pone en la Ciudad de Buenos aires, que en otros lugares no se hace.
La otra discusión es la tarifa como parte de una política de movilidad, ahí me parece que está el nudo de la cuestión que es que no hay una obra de subte, que no hay alternativa para viajar de forma sustentable, que en vez de estar discutiendo los sistemas de transporte automotor eléctricos para que no contamine, tendría que estar discutiendo el transporte público gratuito para que la gente desincentive el uso del auto que resulta ahora que es mayor; entonces no discutimos estas cosas, mientras vemos que en la gestión cotidiana el presupuesto se va en un montón de otras cuestiones que no le llegan al porteño.
¿Vos crees que Larreta recurra nuevamente a la Corte?
Es que la estrategia es esa -reiteró Barroetaveña- ellos hablan en las redes sociales después en los medios amigos y no se sientan nunca con algún periodista independiente, y después van a la Justicia que obedece las órdenes del PRO en cada instancia, y si no en la Corte Suprema que ya conocemos lo que ha generado, una marcha reclamando la democratización de la justicia que vemos que también es una vergüenza.
Aquellos que se plantearon gobernar el país, y que dicen ser serios, responsables, lo menos que tienen que hacer es sentarse a discutir. Esta victimización les funciona evidentemente.
El problema de la movilidad es obvio que hay que coordinarla, porque sufren los ciudadanos.
Al ser consultado sobre su proyecto de nombrar “Alberto Spinetta” una calle del barrio de Villa Urquiza, el legislador explicó:
Porque ahí tenía su sala de ensayo. No es una propuesta mía, miles de vecinos han hablado con familiares y están esperando los 10 años del fallecimiento, pero creo que hay una discusión muy buena más allá de lo histórico, se ha acogido esta idea, de la calle “Spinetta”, y que puede extenderse a otras personalidades, de las ciencias, etc.
Hay que cambiar el nombre a varias calles porteñas por ejemplo la calle Monroe, por el norteamericano de la doctrina que hoy aplica EE.UU. de “América para los americanos”, pero en 1973 esa calle se llamaba Rosas.
Estoy totalmente de acuerdo que se haga la discusión -cerró afirmando el legislador-.