LOS MACARRAS DE LA MORAL

Por Wally Crock.
Pido disculpas por comenzar hablando de una persona demodé, una intelectual que más de uno no reconocería por la calle pero que sirve a modo de ejemplo. Beatriz Sarlo, la ensayista que en algunos días cumplirá 79 años, declaró como testigo ante la jueza María Eugenia Capuchetti y el fiscal Eduardo Taiano en la causa “Vacunatorio VIP”.
¿Cuál fue el resultado de esto? Sarlo aportó una cadena de correos electrónicos que intercambió con el editor de Siglo XXI, Carlos Díaz. Él habría sido contactado por Soledad Quereilhac, esposa del gobernador Axel Kicillof, para que la casi octogenaria participe de una campaña de vacunación, en un momento donde aún no había sido publicada la confirmación de que la Sputnik V no contenía veneno (Carrió dixit) por la prestigiosa revista científica The Lancet. Si había sido aprobada por la ANMAT, pero eso es un dato menor. No vaya usted a pensar que el cipayismo mediático sólo sucede con los medios criollos.
Sarlo habló que le ofrecieron la vacuna por debajo de la mesa, y ante la justicia presentó los mails que la desmienten. El editor de Siglo XXI dijo que no había nada ilegal, el Gobernador Kicillof le dijo canalla por ensuciar a su familia y Sarlo terminó brindando una entrevista en la que aseguró arrepentirse de decir “que se la ofrecieron abajo de la mesa”.
Sin embargo, hay quienes que contrariando inclusive a la protagonista arrepentida siguen sosteniendo que fue “por debajo de la mesa”. En otras palabras, el mal está hecho.
Bien, ¿Por qué planteo esto como ejemplo?
Para exponer al poder de daño de la oposición y los supuestos “no me caso con nadie”, y no para criticarlos a ellos. Sería muy sencillo hacer eso, caer en la fácil de decir lo que se quiere escuchar.
La verdadera crítica a esto es a los compañeros que fueron cooptados por la “logia de la moral”.
-Insfrán está hace 25 años como gobernador de Formosa, es mucho.
-Ajam, pero en lugar de protestar deberían ganar las elecciones…
-No, la protesta es porque dos ciudades de Formosa vuelven a fase 1.
-¿Hay colapso sanitario?
-No, en Paraguay que está del otro lado de la frontera sí… pero en Formosa hay un bajísimo índice de muertes por covid.
-…
Está claro que el problema no es el planteado inicialmente.
Otro cumpa que dice “vacunan poco porque no les dan la cantidad necesaria, tendrían que llegar más”, son engañosas esas frases porque con una verdad parcial cubren la mala gestión. Cierto es que hay menos vacunas que las deseadas, tan cierto como que con ese problema lidian todas las provincias, y al distrito que más dinero tiene peor le fue estadísticamente comparado que otras regiones con muchísimos menos recursos.
Quirós pidió perdón por amontonar a los jubilados para vacunarse en el Luna Park, en San Lorenzo… Y mientras los medios se preguntaban porque no echaban a Vanolli cuando ocurrió una situación muy similar en una cola bancaria (empleado al que terminaron echando) ahora se preguntan si el Ministro de Salud porteño será o no candidato en las elecciones.
No saben cómo tapar su negligencia, si hablan del tema tienen que relacionarlo a Ginés para ensuciar a otro. Pero si lo citan a él se cae de maduro que entonces tendría que renunciar el ministro porteño. En otras palabras, esperan que el domingo se juegue el superclásico para hablar de otra cosa.
El ministro de salud del gobierno radical, vecinalista, y cambiemista de Corrientes, Ricardo Cardozo, chocó el auto y se descubrió que llevaba 91 dosis en una heladerita. Su explicación es que las estaba trasladando a un hospital de la ciudad litoraleña de Goya. Pareciera que la negligencia es mejor vista que la corrupción.
Acá se dan las dos cosas y el miércoles fue ratificado en su puesto por el Gobernador, Gustavo Valdés.
Entonces, pecar de “justos” suena lindo pero tiene un aroma parecido a la idiotez.
La premisa que decía “cuando estemos debemos ser mejores” tiene que leerse de izquierda a derecha: primero hay que estar y recién ahí ser mejores.
Si nos seguimos sumando a los reclamos impuestos y exigir cosas que los integrantes de la logia de la moral nos inculcan sucede lo dicho por Arturo Jauretche: «Cuando el peón y el patrón votan al mismo candidato, el que pierde es el peón».
En los macarras de la moral, Joan Manuel Serrat dice:
Anunciando el apocalipsis
Van de salvadores
Y se les dejas te pierden
Infaliblemente
Manipulan nuestros sueños
Y nuestros temores
Sabedores de que el miedo
Nunca es inocente.




