Históricamente y para los medios de comunicación, el peronismo significa corrupción y totalitarismo. Así por lo menos nos mienten desde tiempos inmemoriales. En la actualidad, observamos a enojados diputados, obesas militantes del odio que jamás gobernaron y a etílicas dirigentes repitiendo estas mentiras.
Pero lo cierto y lo comprobable es que los gobiernos de Perón, Néstor y Cristina cambiaron, reactivaron y otorgaron derechos a las mayorías mientras que el resto de los gobernantes hicieron sonreír a las minorías.
El gran negocio de la política desde 1956 es la entrega de préstamos por parte de los organismos multilaterales. ¿Porque es negocio? simple, porque obligan a los presidentes a aceptar enormes cantidades de dólares a cambio de ajuste continuo y una gran comisión para el ejecutivo, que pide el préstamo, y los bancos actuantes. Todos contentos, menos las mayorías, todos salen en la tapa de los principales medios y cuando mueren aseguran su estatua y su calle.
En blanco sobre negro y para no limitarnos a un juicio de valor pongamos las cosas en su lugar. El peor presidente de la historia firmó un acuerdo por 50 mil millones de dólares, Fernando de la Duda por 13.800 millones, el peronista raro de Banfield por 12.500 millones, Méndez por 9.200 millones, el presidente de la híper por 3.880 millones, Bignone por 2.050 millones, Videla por 500.000.000, Isabel por 360 millones, Onganía por 250 millones, Guido por 100 millones, Frondizi por 375 millones todos millones de dólares, todos pidieron, todos cobraron enormes comisiones junto a los bancos y ninguno de ellos es odiado por el sistema. Néstor pagó 9.810 millones de dólares, o sea no recibió comisión, ni él ni los bancos. Y Cristina ni pagó ni pidió. Cero. La pregunta es ¿Quién es la chorra?, -por supuesto- la que no pidió, ni cobró, ni nada. Por eso las causas que tuvo eran por un regalo de un documento de Putin a su persona, por un memorándum con Irán que votó todo el Congreso o por el dólar futuro, donde no compró un mísero dólar y el negocio lo hicieron los integrantes del peor gobierno de la historia. ¿Me entendió? usted que habla del PBI, que repite como loro el retorno del comunismo, de Roca o de Astroboy, ¿entendió que pasa vergüenza cuando repite como loro?, que del ridículo no se vuelve, ¿entendió?, ah, no cree. Fácil, investigue y verá que el choque con la realidad es fuerte pero sana. Por hacerle el juego a la derecha, pagó remedios, nunca llegó al 82 y tuvo que elegir comer o pagar la luz si es jubilado, y si es trabajador cambió las vacaciones en el mar por las pantuflas y la silla en la puerta. ¿Entendió o seguirá repitiendo lo que la oligarquía quiere? Hágase amigo e integre las mayorías, al menos si usted sigue creyendo que estamos equivocados, somos muchos y más alegres, deje de pertenecer, pobremente, a la amarga oligarquía.
