
En el decálogo cristiano que alguna vez visibilizó Moisés dice que está prohibido mentir. También agrega otra serie de peticiones como no matar, no robar, honrar a los padres y no desear la mujer de tu prójimo, ni tu prójimo sumaría yo. Bien en pleno siglo 21 es probable que exista un decreto que modifique los diez mandamientos o al menos que tache el no. O sea que se pueda matar, robar, salir con la mujer de tu amigo, etc. Todavía ese decreto no se visibilizó, pero si ya se impuso no acatar el mandamiento sobre no mentir, hoy se puede y se llama posverdad.
El Diccionario Oxford, declaró en el 2016, a la posverdad como palabra del año. Las fake news dejaron de ser un artilugio de los medios para conseguir más tráfico. Aram Aharonian en su obra “ El asesinato de la verdad” escribió: “ en el 2016, la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos comprobó que las mentiras pueden llegar a ocupar el lugar del poder real. La ficción y la realidad virtual llegaron a la Casa Blanca.
La transformación de los medios de comunicación en factores de poder es acompañada de la aparición de una metodología para elaborar una realidad ficcional como herramienta de manipulación y construcción de un discurso hegemónico cuyo objetivo es el control social. La comunicación de la verdad pierde su sentido ético y se transforma en mercadería, y la espectacularización del mensaje ocupa el lugar del valor del contenido. Los medios son utilizados hoy como un arma de combate en la nueva guerra ideológica. La información, por su explosión, por su multiplicación, por su sobreabundancia, se encuentra hoy contaminada, envenenada por toda clase de mentiras, rumores, distorsiones y manipulaciones”.
Lo que explica Aharonian se puede ejemplificar. Hoy las tapas de los medios publican que un chofer escribió durante 10 años los robos de un ex presidente y el uso de las valijas. Los medios televisivos anuncian, con bombos y platillos, que la Patagonia tiene una subsuelo con miles de millones de dólares. Los monumentos se derriban porque ya declararon corrupto a todo aquello que empiece con k, incluso los kioscos. Una locutora catamarqueña, también habló de valijas llena de dólares, hizo un libro y luego se desdijo porque todo era mentira. No hay periodista del sistema que no acuse a la gestión k de corrupta. El mismo presidente se ofertó a los empresarios como prenda de honestidad “si se enteran de algún hecho corrupto, acá hay un presidente que va actuar”. Todo el día y todos los días la mentira a flor de piel de los medios, disfrazada de la llamada posverdad.
Los medios hablan de falsas denuncias pero nadie se le ocurre decir, que es imposible llevar 60 millones de dólares dentro de una valija como se dijo. Que resulta increíble que se hayan llevado valijas a Santa Cruz y hayan vuelto vacías para llevar más dinero. Que si tanto se robaron y saben que la justicia es amarilla, como dejan la plata enterrada?. Si fueron capaces de matar un fiscal, como denuncian los medios, porque dejaron vivos a un chofer o a un empleado que los denuncie?. Porqué los empresarios se dividen en sobornos, aportes y coimas cuando se habla de los k, y solo aportes electorales cuando se habla de cambiemos?. Tampoco los medios recuerdan la historia. Porque a Hipólito Yrigoyen también lo acusaron de corrupto, y que tenía las paredes de su casa hechas con barras de oro. Llegaron hasta su casa, rompieron las paredes y fue detenido.
Todo era mentira y tres años más tarde murió en la absoluta pobreza. Perón también fue víctima de la antigua infamia hoy posverdad. Se lo acusó en 1955 de tener en un cajón de escritorio, 20 millones de dólares. Otra vez el tamaño. En ese cajón no entraban más de 10 mil dólares, que tampoco estaban. También se lo acusó de violador. Años más tarde los padres de la víctima confesaron que les habían pagado para denunciar a Perón.
Eso si los medios acusan a quien no es poder. Se olvidan los medios de confusión masiva que los Macri estatizaron deuda, que Franco armó 37 empresas en la época de la dictadura, que el presidente tenía hasta el 10 de diciembre del 2015, dos procesos y 254 causas que fueron borradas en un minuto. Los medios se olvidan de la transparencia de Macri en Iron Mountin con 14 bomberos muertos y causa cerrada, los docentes de Moreno recientemente fallecidos, el correo argentino, la crisis inventada, la cárcel sin justificación de muchos dirigentes opositores, de la desocupación, endeudamiento y entrega del país y demás hechos cotidianos que tiene como finalidad un genocidio gradual. Todo eso se olvida y se publican cuadernos Gloria, bolsos de López que nunca fueron revoleados y promesas presidenciales que nunca se han cumplido.
Esto es la posverdad, la palabra editada de un genocidio en puerta.




