Si hablamos de ideología en el comentario diario, en el bar, en la sobremesa, presumiblemente estamos caracterizando a una persona en forma negativa. Por lo general, para el sistema, la gente honesta, seria, decente y demás adjetivos carece de ideología.
¿Pero que es la ideología? Para algunos es un conjunto de ideas, para otros una corriente que estudia determinadas ideas pero ninguna definición nos dice que es algo negativo para el ser humano.
La derecha piensa lo contrario. El juez Violini acaba de liberar 2300 presos como consecuencia del peligro del virus. La parte residual amarilla ya comenzó a delirar. Que liberaban para proteger a los k, que era la excusa para que el presidente se quedara con el país, que iban a ser patrullaje para apretar jueces y demás delirios. Todo obviamente por una cuestión ideológica.
Estos amarillitos no se detuvieron a pensar que en principio cumplen una domiciliaria y el peligro que una masa humana toda junta y hacinada representa para la sociedad en estos tiempos.
En otros tiempos la situación no se hubiera presentado y si el juez repetía esta historia seguramente que sería criticado por la sociedad toda. Pero los tiempos han cambiado. Y la ideología no tiene que ver con la justicia, pues los códigos carecen de ella.
Pero claro, la causa amarilla exige justicia. Y si le damos la razón también podíamos exigir prisión para todo el gabinete nacional que gobernó hasta el 2019. Causas sobran. Más de un ciudadano está esperando que Macri y sus secuaces paguen por el saqueo que hicieron. Y si hay ideología para liberar presos, no existe la misma para no condenar aquellos que fugaron capitales, que lavan sus dineros en Panamá y que hicieron de una nación una colonia, o acaso no son delincuentes los mega-empresarios argentinos y el equipo de Macri y su ballet.
No es divertido sacar presos, pero tampoco lo es que los ceos, representantes de la oligarquía, caminen libremente por las calles sin pagar por lo que hicieron. No es divertido escuchar a una montonera hablar de la seguridad, o se olvidan cuando Patricia Bulrich ponía bombas, se abusaba de los jubilados y hoy hace el papel de hada madrina?.
La justicia es un poder. El presidente no abusa de ella y ni le exige nada, sino más de uno estaría preso. Y si no le pide prisión para algunos que la merecen tampoco exige que saquen a los presos comunes. Violini es juez y actuó según su juicio crítico. Bien o mal es el responsable, el gobierno no tiene nada que ver. Y para la derecha que acusa de ideología al gobierno uno le reclamaría que se preparen más y si es ideología hoy, la pregunta es si no es ideología la derecha y mantener a un saqueador como Macri libre. Muchachos, sean opositores pero recuerden que del ridículo no se vuelve.
