«La foto que habla»: Cristina y Kicillof apuestan por la unidad en plena campaña
Cristina Kirchner y Axel Kicillof se reunieron en Constitución: unidad, estrategia y un mensaje al peronismo a semanas de las elecciones de octubre.

Cristina Fernández de Kirchner y Axel Kicillof se reencontraron este miércoles en el departamento de la expresidenta ubicado en la calle San José 1111, en el barrio porteño de Constitución. El encuentro, que se mantuvo bajo estricta reserva, duró una hora y media y se produce a menos de un mes de las elecciones legislativas del 26 de octubre.
El gobernador bonaerense llegó por la tarde al edificio, donde Cristina cumple arresto domiciliario. Según trascendió, el encuentro se desarrolló en un clima de análisis político y sin fotos oficiales, lo que reforzó el carácter reservado de la reunión.
En la mesa estuvieron dos ejes centrales: la situación económica y social que atraviesa el país bajo el gobierno de Javier Milei y el rol del peronismo en el último tramo de la campaña.
«Hay que sumar fuerzas»
La frase que más resonó fue la de «sumar fuerzas para la elección de octubre», que sintetiza el mensaje de unidad que ambos dirigentes buscan enviar al interior del oficialismo. En un escenario marcado por tensiones internas y la crisis económica, Cristina y Kicillof coincidieron en que la prioridad es sostener la cohesión del espacio.
Un reencuentro tras cuatro meses
La última vez que Cristina y Axel se habían visto fue el 10 de junio, en la sede del PJ nacional, el mismo día en que la Corte Suprema ratificó la condena a seis años de prisión para la expresidenta. Casi cuatro meses después, el reencuentro en Constitución aparece como un gesto político de alto impacto en la previa electoral.
Mensaje al peronismo bonaerense
El gobernador bonaerense llega al encuentro en medio de su propia pulseada con la oposición por un pedido de endeudamiento en la Legislatura. Ese contexto, sumado a la necesidad de mostrar unidad, refuerza la lectura de que el cónclave en San José 1111 no solo tuvo proyección nacional, sino también provincial.
La reunión buscó dejar atrás las tensiones que atravesaron al PJ bonaerense durante el año. “Fue un buen encuentro”, señalaron cerca de ambos dirigentes, que coincidieron en que no es momento de disputas internas mientras el gobierno de Milei enfrenta una crisis cada vez más aguda.
FUENTE. GLP