JAVIER FERNANDEZ: El gran desafío científico técnico de las inundaciones
Para conocer cuánto hay de real sobre el nocivo efecto que han tenido en las inundaciones recientes en Luján y otros distritos la construcción de countries y canales para cultivar la soja, consultamos al Arquitecto de la UBA Javier Fernández Castro, profundo conocedor del tema quien dejó sentado que controlar y evitarlas, sigue siendo un fuerte desafío científico técnico, frente al reto del cambio climático.
Por Claudia Bustamante y Margarita Pécora
“Tenemos que partir de una realidad básica que sirve para entender que toda el área metropolitana de B. Aires está asentada en una planicie de muy poca pendiente con lo cual, cualquier fenómeno abrupto de precipitaciones tiene muy poco escurrimiento y eso hace que las cuencas de Lujan-Reconquista, al Norte y Matanza-Riachuelo al Sur, obviamente se ven desbordadas y parte de las construcciones o no controladas que se han hecho en sus bordes o desembocaduras agraven mas la situación.
¿Las obras de infraestructura realizadas son suficientes para aliviar las repercusiones de las intensas lluvias que estamos viviendo?
Recién se están empezando obras de infraestructura más importantes y se están definiendo planes de manejo sobre todo para estas dos grandes cuencas. Lo de Luján fue bastante trasmitido por todos los Medios por el carácter emblemático que tiene la Ciudad como centro de peregrinación, y también allí hay estudios urbanos y de manejo que llevaban mucho tiempo postergadas y recién se están realizando.
¿Incide la construcción de countries y barrios cerrados que en algunos casos hay que elevar el piso?
Si, fuertemente, a nivel territorial todas las urbanizaciones que se han hecho cavando artificialmente parte de la tierra para rellenar otros terrenos y que pasan por lagunas, a partir de un terreno que no era apto para urbanizar y le agregan un valor inconmensurable a esas tierras, pero al mismo tiempos están taponando las desembocaduras naturales, y las aguas discurren a donde no estaba previsto e inunda áreas.
También otros emprendimientos junto a los arroyos donde se levantan la tierra sin pensar qué pasa en barrios vecinos.
¿Las leyes que están vigentes son suficientes o hay que parar la construcción de los countries o rogar que llueva menos?
El tema es que cada vez llueve más por el cambio climático. Habría que adecuar algunas normativas o leyes pensadas para otro ciclo de precipitaciones. Una como la que tuvimos las semanas anteriores ocurría cada 10 o 15 años y ahora es más frecuente.
Políticas de planeamiento entre provincias y municipios, donde no solo se promulgue la Ley sino que también se verifique. Con un Estado más presente se puede morigerar la situación.
¿Como académico me puede decir si estamos creciendo bien como área metropolitana?
Básicamente no. Tenemos un modelo de crecer en extensión ocupando y consumiendo suelo cuando hay posibilidad de densificar áreas ya urbanizadas y así abaratar costos aprovechando infraestructuras existentes. El área metropolitana viene consumiendo suelos al interior del territorio y ocupando zonas que no deberían urbanizarse por su cota de inundación.
Por las imágenes televisivas de las evacuaciones se ve que muchas ocurrieron en viviendas precarias inundadas a orillas de arroyos como indicativo de descontrol en la urbanización. ¿Pudiera proponerse la construcción sobre pilotes?
Esto desde el más puro sentido común a veces está ausente en los ámbitos académicos. A veces hay dos tipos de soluciones. Cuando hay que construir vivienda nueva hay que tener conciencia del terreno y en caso que sea inundable, existen soluciones como la arquitectura tradicional del Tigre, sobre palafitos, donde hay convivencia en terrenos que pueden estar anegados o no, pero que no implica necesariamente la inundación de la vivienda. En áreas ya consolidadas, ya no hay otro remedio porque no se puede sustituir todo ese tejido para hacer obras de ingeniería de alto costo.
…Se destruye muy rápido pero construir cuesta un montón.
Existen reparticiones pero como sucede con tantas cosas, hace 20 años se desguazaron las oficinas y los haberes técnicos perdieron capacidad de regulación.




