HUMOR SOCIAL

Por Gabriel Princip.
En la puerta del Congreso fueron atacados diputados, referentes y dirigentes. Los atacantes, gente que pudo o no ser enviada por el macrismo, ubicaron a las diputadas Tundis y Bergman más Juan Grabois y estos sufrieron la descalificación y el escupitajo de hombres y mujeres, no muchos, pero que son parte de la sociedad. Lo raro es que ningún diputado de juntos por el cambio fue insultado ni vituperado. ¿Qué raro no?
De todas maneras, la gente está mal. Hace dos años la mayoría eligió castigar a una banda de saqueadores encabezados por el clan Macri y hoy teme que estos vuelvan el año que viene. Para colmo de males el gobierno de Alberto ya finalizó. Hoy está intervenido por Sergio Massa, alguien que aportó un seis por ciento de los votos, que la dupla gobernante no lo quería y menos aún la militancia.
El presidente es del Frente Renovador, el superministro es quien fundó el Frente Renovador, la presidenta de la cámara baja también del mismo partido, ¿Me equivoco o las bases peronistas le dieron el gobierno a unos liberales para blanquear la deuda que armó el imperio con Macri y culmina el año que viene con el retorno de juntos por el choreo? ¿Me equivoco?, ¿Ustedes están seguro que me equivoco?
Cristina eligió este formato, le dio carta blanca al presidente para que armara un gabinete digno de una Revolución Libertadora y ahora acuerda con el liberalismo solo para llegar a las elecciones. Usted no creerá que la situación económica mejorara por el solo hecho de convocar a superhijitus. Tan ingenuos no podemos ser.
La bomba la colocó Macri, Guzmán la hizo estallar y ahora la militancia reza por un liberal. Nuevamente debemos decir que la elección de Fernández fue un gran error, error que nunca reconocerá la Cámpora que aspira a quedarse con la provincia de Buenos Aires. Y la gente, bien gracias.
Todavía falta, pero el humor social va camino a repetir el 2001. Si Massa acierta el peronismo no estará conforme y si le erra menos. La trampa la colocó Macri y el kirchnerismo entró ingenuamente. Nadie en su sano juicio pudo haber pensado que el alfonsinista Alberto Fernández tuviera éxito, como nadie puede presumir que Sergio sea un patriota. Nuevamente el voto popular fue estafado. Cristina no militará el ajuste, porque se viene un gran ajuste, ¿O usted cree que si vienen los dólares vendrá a cambio de nada? y si no vienen, a sufrir con un billete que subirá día a día licuando salarios y jubilaciones. Llegó el tiempo de aprender a no aplaudir cualquier cosa, y entender que la sana crítica debe ser escuchada. Por aplaudir como focas nos tragamos cientos de sapos para que pueda volver un gato. ¿No le parece?