HUGO R. SANCHEZ: Emocionado recuerdo por un padre, ejemplar peronista.

Por Gabriel Russo –
En el libro de Daniel Brión titulado “Lealtad”, aparece una serie de testimonios sobre aquellos que fueron leales al peronismo en el primer golpe del ’51. Uno de ellos era Marcelino Sánchez, un patriota ejemplar, militante peronista que en aquella época era suboficial. En esta oportunidad Comunas establece contacto con el hijo, Hugo Rodolfo Sánchez.
Imagino que Ud. Estuvo el viernes en la presentación del libro de Brión…
Por supuesto, ahí estuve con mucha emoción. Fue un momento grandioso, emotivo. A mi edad, 74 años se me hizo un nudo en la garganta escuchar los relatos de los colaboradores de Brión; pero fue un lindo recuerdo de toda una vida de mi padre- expresó Hugo-.
Al ser consultado sobre el accionar de Marcelino en el año 1951, el hijo afirmó:
“Mi viejo falleció en el 2007 con 88 años. El fue registrado en el 51, al momento del intento de golpe en el Regimiento 18 de Tanques Campo de Mayo. Era suboficial y esa madrugada cuando se produce el golpe ya él venía abrazado a la causa del justicialismo con un grupo de compañeros, toda la mayoría suboficiales, se la pergeñaron para evitar o entorpecer de alguna manera el accionar de esta gente y fue ahí cuando buscaron sabotear todo el armamento más importante que eran los ataques. Recuerdo según lo que me contó mi padre que en algún momento intentaron ponerle algo a los tanques, de nafta, descomponer otros sistemas etc.
¿En ese momento era casado tu viejo?
Sí, era casado, yo nací en el año ’47 así que tenía cuatro años y vivíamos en el barrio de suboficiales “Sargento Cabral”, que está en el mismo Campo de Mayo.
Hubo un intento de golpe en el ’51 y otro en el ’53. Creo que Perón se equivocó cuando los perdonó a los golpistas. ¿Vos que pensás?
Por supuesto que sí, vos fíjate que no tomó ninguna medida, sí sumarió a los oficiales sublevados dentro de lo que es el orden militar y nada más. Todo lo contrario, de los fusilamientos que hicieron en el ’56, después de la Libertadora y demás. Perón tenía que haber sido más drástico con toda esa gente y no sé qué hubiera pasado, seguramente no hubiéramos llegado a ser lo que fue el ’55.
Al mencionarle a Lanusse, el hijo de Marcelino opinó:
Lanusse fue uno de los golpistas del ’51 que estaba a cargo de una de las puertas de ingreso a Campo de Mayo que era por donde iba a ingresar Menéndez que era el jefe de los insurrectos.
¿Y tú viejo qué te contaba aparte del intento de golpe del ‘51 cómo fueron esos días?
En el ‘51 mi padre tuvo el único fallecido en esa revuelta del Regimiento, que fue el cabo Miguel Ángel Fariña. Murió en brazos de mi padre. Dentro del Regimiento se habían refugiado en uno de los depósitos y ahí es cuando viene un tanque con uno de los insurrectos a decirles que depusieran armas. Ellos se resistieron y el cabo Fariña iba dentro del tanque con el oficial rebelde. El cabo Fariña era leal al grupo de suboficiales de mi padre, salta del tanque, y ese oficial, cuando va corriendo Fariña hacia donde está mi padre, le dispara una ráfaga de ametralladora que impacta en el hombre. El cabo se arrastra hasta donde están los muchachos y muere en brazos de mi padre que en ese momento saca una pistola y le pega un tiro al oficial que no murió, si no, hubiera tenido consecuencias legales más grandes.
¿Cómo queda el pensamiento de tu padre en el libro? ¿Y decime si te gustó el libro?
El libro está hermoso hay que tener en cuenta que yo con la edad que tengo, a pesar que tenía cuatro años, a través de los años y de mi crianza y la militancia permanente que tuvo mi padre hasta los 85 que murió a los 88, él tuvo una historia linda, larga de mucho esfuerzo.
¿Quién es Beatriz Goyena?
Es la segunda esposa de mi padre, una mujer grandiosa que lo apoyó absolutamente en todo lo que fue la pasión de mi padre, acompañándolo a reuniones habidas y por haber.