HERRAMIENTAS DE LA OLIGARQUÍA

Por Bret Sinclair.
La población enloquece cuando escucha la palabra inflación. Esta es una herramienta de la economía, no siempre es letal. En tiempos del primer gobierno peronista había inflación pero el salario la superaba. Consecuencia la población vivió con un bienestar nunca visto. De todas maneras la oligarquía impulsó el golpe por la alta inflación. La revolución fusiladora fue gobierno tres años con menos derechos y mayor inflación que el gobierno de Perón.
Los gobiernos de k también tuvieron alta inflación, otra vez el salario la superó y la gente pudo vivir como en los tiempos de Perón.
Pero la oligarquía tiene otras herramientas para controlar a la población. En Europa, la tasa de inflación no puede superar el 3 por ciento, aunque por la guerra llegó al 10. Si este 3 es superado el país es multado. No hay inflación pero existe una alta recesión. Escasas ventas, pocas compras.
Pero para no creer que todo es culpa de la inflación y de la Argentina mencionemos algunos hechos de la historia. Ejemplo el término “silueta” proviene del apellido francés Siluette. ¿Quién era este buen hombre?, el encargado de la economía en la época de la revolución francesa. El funcionario diseño un plan de ajuste intolerable que causó una hambruna. El francés llegó a tremenda delgadez por el cual cuando veían un flaco le decían siluette o sea silueta.
En la Antigua Roma, Livio Druso en el año 91 a. c. y luego de una reforma agraria realizada por los hermanos Graco que pagaron con su vida por ese atrevimiento ante la oligarquía, intentó utilizar las fuerzas del pueblo para restituir el poder al Senado y ubicarlo nuevamente en el lugar preponderante que históricamente gozara. Unificó a los caballeros y senadores para hacer frente a las exigencias de los itálicos.
Druso, -cuenta Victorio Pirillo, en su libro Espartaco-, se había acercado al senado y a las clases oligárquicas, pero también quiso ganarse a la plebe y convertirse en un líder popular. Impulsó la ley Frumentaria, que consistía en subsidiar y distribuir el trigo a la plebe a precios muy bajos. Para solventar esta medida sin que perjudicara las arcas y el tesoro romano, astutamente devaluó la moneda agregándole cobre a una octava parte de su peso en plata.
Druso fue asesinado, desató una guerra entre dos bandos y la inflación se instaló en el imperio romano para que la oligarquía pudiera sonreír.
Favaloro fue siempre un ferviente antiperonista. Odiaba a Perón porque había inventado la inflación. Así lo aseguró en un programa de Bernardo Neustad. Se olvidó de todos los gobiernos militares, de Alfonsín, incluso de Menem que para llegar a la convertibilidad se aumentaron los precios un 200 por ciento.
Hay mas casos que prueban que la inflación no es el demonio pero terminamos aquí. Si el porcentaje del salario supera a la tasa de inflación acá no ha pasado nada, pero es mortal cuando el salario atrasa como en todos los gobiernos de derecha, radicales incluidos. Por eso reclame un modelo nacional, jamás un ajuste y menos un acuerdo con el FMI. ¿No le parece?