En la década del 50, Arturo Jauretche hablaba de la superestructura cultural. Palabras más,
palabras menos el concepto abarcaba a aquellos que laboraban para el sistema ya sea en
medios de comunicación o casas de estudio. Desde la escuela hasta la agencia de publicidad
pasando por la radio o la universidad se encolumnaban los soldados para servir al poder real. Y
este los premiaba.
Los años pasaron y nada ha cambiado. Hoy sabemos que Vilouta es Martín
Fierro al relato deportivo superando a Víctor Hugo Morales aunque no pueda hilar un sujeto y
predicado. Porque es premiado, pues es servil al poder hablando en televisión de Doña Rosa,
la corrupción y adjetivando con un «Qué barbaridad!» sin elaborar una idea con contenido.
Si repasamos el listado de periodistas de medios dominantes los Vilouta prevalecen. No nos
puede sorprender un Jonhatan Viale en el CNN ni un Santiago del Moro multipremiado. Ahora
bien, así como los Martin Fierro son la palmada del sistema en la superestructura cultural
también podemos observar los premios Pulitzer. El más famoso de los premios jamás fue
otorgado a un periodista por investigar el poder real. Sí se premia la muerte en Iraq o el
hambre en Biafra pero jamás a quien investiga a los causantes de las miserias humanas, las
familias hacedoras de las corporaciones supranacionales.
La pregunta es, y porque no pasa esto, porque no se investiga. Las respuestas pueden ser dos,
una la que todos suponemos, nadie investiga a los auspiciantes de los diferentes medios, pero
a pesar de esta presunción nos estamos equivocando.Cuando hablamos de corporaciones podemos citar a la BIlderberg ( fundada por el príncipe
Bernardo de Holanda), la Trilateral ( fundada por el grupo Rockefeller) y la CFR – la comisión de
relaciones exteriores ( también fundada por la familia Rockefeller). Estas corporaciones son las
principales y aquellas que se han repartido el mundo. En la primera encontramos grupos
empresarios, en la segunda empresarios mas políticos europeos y asíaticos y en la CFR medios
de comunicación.
The Washington Post, Los Angeles Times, The Wall Street Journal, La NBC, la CBS, la ABC, la
Fox, Time, Fortune, U.S. News and Worl Report son los principales integrantes de la CFR. Al
mismo tiempo interactúan con la Bilderberg y la Trilateral jugando a un Teg gigante.
Entonces con estos datos en la mano, alguien imagina algún periodista investigando al poder
real cuando sus patrones forman parte de este. Entonces podemos investigar las
consecuencias de la desintegración económica, podemos hablar del terrorismo, del hambre,
de la corrupción y seguramente seremos premiados. Pero jamás se habla del origen y de
aquellos que determinan la pobreza humana.
Cuando Jauretche hablaba de la superestructura cultural no había tanta información sobre las
corporaciones, pero desde el ámbito local supo anticipar la descripción del sistema. En la
década del 50, antes y ahora los medios fueron, son y serán dominantes oficiando de grupo de
tareas de la oligarquía.
