Todos los medios, todos nos comunican diariamente de la cantidad de enfermos y muertos en el planeta por el COVID- 19. Nadie nos cuenta el pasado, tampoco el futuro. Ningún periodista, progre o de derecha nos ayuda a razonar como ocurrió todo ni siquiera el futuro que nos espera salvo decirnos que “nada será igual”. No hay como imponer el pánico para tener controlada a una sociedad.
Noam Chomsky, Alcira Argumedo, Atilio Borón, Daniel Estulin, Cristina Martín Jiménez y Jorge Rachid han relatado que el virus se diseñó en un laboratorio. Hoy China y Estados Unidos coinciden en esta idea pero uno le echa la culpa al otro. Ninguno de estos intelectuales, sin intereses económicos que se conozcan, formarán parte de una tapa de ningún medio dominante. Con lo cual uno debería creerles. Al mismo tiempo, un segmento de la población mundial prefiere creer en el mal comunista que proporciona China o un murciélago. En síntesis, la elección de cualquier pensamiento es un tema de fé.
Por otra parte, el ministro Guzmán oferta un plan de negocios para saldar la deuda eterna que favorece al país y no otorga tanta rentabilidad a los bonistas privados. Los intelectuales de la economía, los premio nobel todos están de acuerdo con Guzmán. Del otro lado, los medios otorgan difusión a los Prat Gay, los Melconian, los Macri boys para criticar el plan de Guzman. Melconían trató de chantas a Sachs, a Stiglis y a Pikketi. En fútbol sería desconocer a Messi para darle identidad al zaguero de Piraña que lo llevó al campeonato en 1979. Los medios, hoy como nunca, están con Piraña, y con quien iban a estar. Seguimos hablando de fe para creer a uno o a otro.
Se viralizan diferentes documentales sobre el accionar del virus y su probable vacuna y consecuencia. Es probable que la mayoría sean operaciones de los servicios de inteligencia sino todas. Unos serán de la CIA, otros del Mossad, otros de la KGB. Otra vez debemos creer o no.
El tema radica en nosotros cuando tratamos de analizar todo en su conjunto y establecer ganadores y perdedores. Si hablamos del virus podemos decir sin temor a equivocarlos que las grandes corporaciones han obtenido grandes ganancias. No olvidemos que los grupos de poder, todos son dueños de laboratorios. También son los amos de los bonistas privados y los mismos que pretenden las riquezas con un mundo más chico. Seguimos en la tendencia de creer o no porque los medios nunca lo informarán.
Quienes manejan las corporaciones supranacionales son dueños de bancos, medios, consultoras, petroleras, y manejan servicios de inteligencia como la CIA e Interpol además de ser dueños de la reserva federal, o sea el que pone el dinero en la calle.
Al mismo tiempo y siguiendo con una fe ciega en llegar a la verdad al margen de lo que opinen los panelistas sin conocimiento alguno, se sabe que la vacuna pronto llegará, así lo declaró Bill Gates. El mismo que anunció en el 2015 “en cinco años la próxima guerra sería contra un virus”, el hijo de William Gates que es miembro o lo fue de la Sociedad Americana de Eugenesia. Gates el mismo que declaró que la vacuna contra la gripe que coloca a los africanos bajo la Fundación Gates junto a su esposa Melinda reduce la población porque actúa como anticonceptivo. Gates, un filántropo que sabía todo y comunicó todo en el evento 201 que se desarrolló en Nueva York en octubre del 2019, denunciado por Noam Chomsky, Daniel Estulin, Alcira Argumedo, y que se trató las consecuencias de la pandemia del coronavirus. Gates quien sabe que la vacuna llegará el año que viene y que actuará como control del humano porque será parte del ADN. Esto último no lo hizo público. Una vacuna que puede ser útil para controlar al humano con la excusa de la cura de la gripe.
Entonces yo creo que esto fue la previa. Ensayan con un virus, obtienen una cantidad relativa de muertos, ponen a trabajar día y noche a los medios para que no hablemos de otra cosa. El aislamiento origina menos nacimientos pero el objetivo final es la vacuna para el control. Por otro lado, Bill Gates anuncio que una vez que se obtenga la vacuna se probará primero en los países pobres, los mismos que son sometidos por la deuda, o sea ¡Bingo! Menos gente en el planeta, más gente pobre y unas pocas familias disfrutando del poder y todas las riquezas. No, se haga ilusiones porque la película no terminó ahí, o mejor dicho si terminó. Ya están preparando la continuación de este film de terror, y la pregunta es ¿cual sería? -Virus dos, la historia continua-. Si pudieron diseñar un virus para quedarse con gran parte del planeta y menos gente porque no diseñar otro para dentro de cinco, diez o quince años, la matriz ya la tienen. No se dio cuenta. La matriz es la siguiente: científicos trabajando para ellos bajo fundaciones financiadas por donaciones, si son ellos encima descargan impuestos. Alguno de los hombres de ciencia inventa un virus. Un agente de un servicio de inteligencia, que también es de ellos, lo coloca en un murciélago, vaca o chancho. Los medios, son los tanques que bombardean las ciudades con mala información en forma incesante. Los medios son de ellos, los periodistas también. Por otro lado y completando la forma de una tenaza, llegan los bonistas “privados” aniquilando países con la deuda realizada por políticos traidores. Cerramos el círculo con filántropos que hablan de vacunas que sirven para controlarnos y acá terminó todo. Como dije al principio es creer o reventar. Seguramente alguien dirá que estoy equivocado, pero no podrá probarlo ya que se fundamentación será la desconfianza o la tapa de los diarios, que obviamente son de los amos del planeta. Es creer o no pero ante todo dudar, y con la duda se llega a la conclusión que los bueno solo ganan en las películas.
