El lunes y martes próximo, son feriado nacional, con motivo de «celebrarse» el carnaval, una fiesta absolutamente pagana.
Lo más extraño, es que se festeja en la mayoría de los países católicos, apostólicos y romanos. Una hipocresía más, de la Iglesia. La enorme mayoría de los chupa cirios, aceptan está fiesta, de la misma forma que aceptan y aceptaron la «SANTA INQUISICIÓN», fundado por el sacerdote Torquemada.
Se celebra antes de la Cuaresma Cristiana, que se inicia el MIÉRCOLES de CENIZAS. Paganismo en su estado más puro.
Está fiesta conforme al calendario por el cual se rige el mundo, se celebra en el mes de febrero o marzo.
Se combinan diferentes tipos de disfraces, grupos de personas cantando generalmente, candombe y canciones afroamericanas. También existe desfiles de carrozas, con bellas mujeres semidesnudas y hombres luciendo físicos de verdaderos adonis.
La celebración, insisto, pagana, tiene características comunes en casi todos los lugares donde se festeja.
Es un tiempo de cierta permisividad y también, cierto descontrol, al límite de lo pornográfico.
Se festeja desde el siglo XII, aproximadamente.
Está fiesta pagana adoraban y adoran al dios Banco, que era el dios romano del vino.
Para algunos historiadores, está celebración ultra pagana, se remontarla al antiguo Egipto, que eran politeístas, es decir, que adoraban varios dioses, y lo festejan, o festejaban desde hace más de 5.000 años. Está celebración era casi idéntica a la que festejaba el siniestro, nefasto y genocida de cristianos, el Imperio Romano.
Aunque el carnaval no es aceptado la Iglesia Católica, Apostólica y Romana, el paganismo de está fiesta, se celebra en todos los países cuya religión oficial, es el catolicismo. Celebrándose en mucha menor media en países cristianos ortodoxos.
Aprovechando está fiesta pagana y de los disfraces más insólitos, un amigo que tiene un comercio de este rubro, me dijo: que un cliente llego a su tienda, ubicada en el barrio de Balvanera (ONCE) le pidió una sotana y una careta de Sergio Massa, el actual Ministro de Economía. Mí amigo asombrado, con respeto le preguntó a su cliente circunstancial: «disculpe señor, pero me intriga de que se va disfrazar»? El cliente le contestó, muy simple. La sotana y la careta de Massa, me permite disfrazarme de un REVERENDO HIJO DE PUTA. Ambos terminaron en una larga y genuina carcajada.
Cosas del carnaval.
POSDATA:
Es casualidad, pero ocurre que las casualidades no existen. A días del carnaval, se realizó ayer la MESA ELECTORAL DEL FRENTE DE TODOS CONTRA TODOS. La Biblia y el calefón. Traidores y «leales» todos mezclados en la vidriera de los cambalaches. Carnaval puro. Todos disfrazados de PERONISTAS. Todos con sus caretas puesta. Por eso digo, no es casualidad, que a días del carnaval, los allí presentes, bailan al compás del carnavalito político.
