ALGUNOS DICEN
Por Carlos Galli.
Algunos medios de comunicación, sectores de la cultura y cierta dirigencia política, expresan que el PERONISMO perdió la calle. Y tienen razón. Perdió la calle porque no gobierna el peronismo. Gobierna una coalición, que son el agua y el aceite. Son como un gigantesco panal de abejas, un enjambre, con una «reina», miles de obreras, y demasiados zánganos.
Claro que el peronismo perdió las calles, las avenidas, los pasajes y las cortadas. Perdió el empedrado y el asfalto. Pero ocurre que el peronismo no gobierna. Si gobernara no habría veinte millones de pobres y cinco de indigentes. Si gobernara el peronismo, no hubiera seis de cada diez niños y niñas bajo la línea de pobreza, porque ellos serían los ÚNICOS PRIVILEGIADOS.
Si gobernara el peronismo, existiría una revolución social, donde la masa sudorosa, los laburantes, el obrero, el estudiante, el pequeño comerciante, todos tendríamos una mejor calidad de vida, tendríamos la dignidad del trabajo. Si gobernara el peronismo, todo sería distinto. El pueblo sería feliz, porque los mejores días fueron, son y serán peronistas. Porque “donde hay una necesidad, hay un derecho” dijo la única abanderada de los humildes. La Evita del pueblo, que quería un peronismo revolucionario. Y hoy, la palabra REVOLUCIONARIO, es una maledicencia. Algunos hasta nos tratan subversivos o de terroristas.
Si gobernara el peronismo, existiría una juventud maravillosa y gloriosa, como aquella JP. La que ganaba las calles, aun con gobiernos de dictaduras y genocidas, el peronismo estaba en las calles, poniendo el pecho y dejando la vida.
Es verdad que perdimos la calle, y la perdimos porque los peronistas auténticos, nos dejamos arrebatar las bases, la doctrina occidental, humanista y cristiana del General, en manos de pseudos-progresistas o neo-peronistas, que incluso, hasta desprecian la MARCHA, nuestro segundo himno.
Perdimos la calle, SÍ, absolutamente. Hoy la tienen grupos sociales de «izquierda», que son funcionales y bancados por la más sucia y oligárquica derecha. Esa derecha que en los ‘70 mataban y ordenaban matar, y hoy a su manera hacen lo mismo.
El peronismo perdió la calle, SÍ, la hemos perdido porque no gobierna el peronismo.
Pero llegará el día en que el PERONISMO volverá al poder y al gobierno, y entonces volverán aquellos días, donde el PUEBLO, volverá a ser feliz. O usted, amigo lector, ¿cree con una mano en el corazón, que el laburante, es feliz?
Yo soy un trabajador y un peronista.
Con casi 70 años, que fui secuestrado y torturado en la maldita ESMA, hoy Museo de la Memoria. Amigo, ¿usted cree que puedo ser feliz? No soy feliz. Solo seré feliz cuando el PERONISMO gane nuevamente las calles y el poder.
