José Manuel De la Sota fue el último de los precandidatos presidenciales en hablar el domingo. Fue clarito y concreto. “Hemos derrotado al gobierno nacional y al macrismo”.
Por Miguel Angel de Renzis
Antes lo precedió Schiaretti con un largo discurso y anunció que lo habían llamado Macri, Scioli, Zanini y Cristina, entre otros, para felicitarlo.
Sin pérdida de tiempo, los muchachos trabajan para el futuro.
Convencidos de la polarización, piensan que De la Sota y Massa no estarán en la segunda vuelta y quieren asegurarse una mano cordobesa, que es el segundo distrito electoral del país.
Mientras tanto Verna, en La Pampa, le ganó a los candidatos de Cristina en la interna peronista. Y Scioli, desde la Rioja saludó públicamente a Schiaretti y a Verna.
Nada está claro. El PRO sacó más de 20 puntos de ventaja, y sin embargo, a la fórmula la votaron menos que en las PASO y perdió un legislador, que ahora discute con el FPV.
Y además, pese a la ventaja, deben ir a la segunda vuelta.
En Santa Fe, cantaron victoria y terminaron perdiendo. En Mendoza Macri se subió al triunfo demócrata y radical.
En el mientras tanto, Felipe Solá puede dar la sorpresa en Buenos Aires, relegando a María Eugenia Vidal al tercer puesto.
Por las dudas, la oficina de compras del Gobierno de la Ciudad mandó a comprar alfajores cordobeses.
