
El presidente, en su último mensaje con respecto al coronavirus-19, alargó el aislamiento. La pregunta es ¿qué aislamiento? La cuarentena que se solicitó al pueblo argentino salud, nunca se cumplió, de ahí la cantidad de enfermos y el aumento en las muertes. Mientras, la oposición critica que es la cuarentena más larga del mundo, que afecta las libertades, que la república y la mar en coche.
Los fanáticos de los globos amarillos que desfilan en los canales autoproclamándose objetivos, independientes y los más lindos del país insisten con algo que no existe. El mismo presidente, en su mensaje, y con una clara decepción dijo: “nos critican pero la cuarentena que no se cumplió, no existe”.
Salvo algunas ciudades que volvieron a la fase 1 porque el desmadre era total, el resto sigue igual. En el peor de los momentos, en el supuesto pico y en momentos que la medida que la provincia pedía era lógico -dado que estamos en invierno- era apretar el botón rojo.
Pero no, alegremente Rodriguez Larreta sigue abriendo CABA a pesar de que los hospitales porteños están a punto de colapsar. El gobernador bonaerense mantiene la misma fase pero su discurso fue agresivo, crítico y más parecido a la realidad. En el medio “Roberto Carlos y yo tengo un millón de amigos”, perdón -en el medio Alberto Fernández-.
La movilidad del argentino medio en la primera cuarentena fue del 72 por ciento según Google, por ello el éxito primario del gobierno del frente. En la última cuarentena, la movilidad fue y es del 25 por ciento o sea uno de cada cuatro cumplió. Ese porcentaje tiene Argentina según Google; Alemania 44%, Reino Unido 43%, España 30%, o sea, en Europa en verano y ante un posible rebrote se cuidan más que Argentina.
El gobierno hace lo que puede ante un pueblo desobediente. Ansioso de ir a una fiesta o un bar, pero eso hoy trae consecuencias. Jujuy estuvo más de 100 días sin casos hasta que abrieron los bares y el turismo, hoy está en fase uno y con la gente enterrando sus muertos. El presidente acuerda más de lo que conduce, pero la derecha le encontró la vuelta. Manda sus soldados a las marchas mientras los capitanes y generales están de vacaciones, o a los trolls copando la nube cibernética. Larreta sigue aumentando en las encuestas, sigue haciendo política a pesar de los muertos porteños, que en su mayoría no es el público que lo vota. Le importa nada que muera la gente, total está en campaña y para mejor acaba de incorporar a su equipo a Marcos Peña. Entonces, Alberto se manifestó amigo de Larreta, pregunto ¿también lo es de Marcos Peña?




