DELFINA ROSSI: El maquillaje macroeconómico del macrismo

El cosmético que busca ponerle el gobierno a la macroeconomía para llegar a las elecciones presidenciales con la esperanza de tener alguna chance de ganar, es eje de la nota que ofreció a Comunas, la economista Delfina Rossi, quien ejerció, aunque por corto tiempo, el cargo de directora del Banco Nación, y posee un doctorado en Ciencia Política en la Universidad Torcuato Di Tella, además de ser docente de Economía en la Universidad Nacional de Avellaneda.
Por Rodrigo Marcogliese
Este gobierno deja una bomba, que si la va a hacer estallar ahora, o en unos meses podría complicar a un futuro gobierno. ¿Cómo lo ves?
Después que anunciaron el famoso plan “alivio”, en donde fijaron algunos de los precios regulados, del transporte, de los servicios, están haciendo estrategias de un poco ir liquidado los dólares que el FMI le prestó al Tesoro, con las consecuencias que eso debe tener en el tipo de cambio, la verdad que el gobierno pareciera que va a ser exitoso en llegar con un tipo de cambio controlado a las elecciones.
La gran pregunta es si ese maquillaje macroeconómico le resuelve lo estructural que estamos viendo en la vida cotidiana que es, más gente durmiendo en las calles, más de 7 mil personas en la Ciudad de buenos Aires, que vemos que se cierran Pymes todos los días. Hoy la noticia es que la fábrica de galletitas Tía Maruca no puede producir más. Vemos cómo se destroza el mercado interno. Creo que por más que busquen buenas noticias como es la reducción de 200 puntos el riesgo país, que paso de mil a casi 800, la verdad no modifica la cotidiana de la gente, el hambre, la pérdida de puestos de trabajo, la situación de desesperanza que hay. No va a ser suficiente todo eso.
¿Es posible una renegociación con el FMI, igual que hicieron en el 2001 hacerlo en noviembre?
No son las mismas condiciones que en el 2001, porque primero que el mundo no es el mismo, y con respecto a la Argentina, la diferencia central es que en el 2001-2002 la Argentina defaultea sobre la deuda privada. La mayor parte de la deuda a pagar en el 2021 es con el FMI. Eso abre un escenario muchísimo más similar al que vivió Portugal y Grecia, en donde la negociación sobre las condicionalidad de los desembolsos y el repago con el FMI pasa a ser central para la balanza de pagos para la Argentina y para ver qué se hace con estos dólares.
Sin lugar a dudas va a haber que tener una renegociación principalmente con el FMI. Si se puede considerar negociar algunos títulos de deuda con el sector privado en dólares extranjeros, no lo sé, seguramente en la deuda en pesos sí que se entra en un esquema de renegociación o al menos de convertirlos en bonos más a largo plazo, eso podría llegar a suceder también, pero acá me parece que el debate que deberían dar las fuerzas políticas que se están enfrentando en la próxima elección, es cómo se generan esos dólares que la Argentina tanto necesita, no solo para repagar la deuda ya constituida, sino para saldar su problema estructural de que cada vez que crecemos necesitamos dólares que no se generan. Entonces si el modelo de acuerdo a UE-Mercosur, que nos designa ser un país agroexportador, y ni siquiera agroindustrial.
Es decir, el supermercado del mundo ya parece una frase de máxima cuando se leen las letras de la UE-Mercosur, en realidad todos los productos y alimentos industrializados pasaría la Argentina solamente a poder exportar soja y tampoco ilimitadamente, o el modelo que defiende la fórmula del Frente de Todos/as, que apuesta por generar Valor agregado, industrias, trabajo argentino, sabiendo que va a haber que importar para producir. Evidentemente no estamos hablando de una economía cerrada, de espaldas al mundo, sino de una economía que se integre al mundo de manera inteligente buscando principalmente la inclusión social y el bienestar de la mayoría de la población.
Día uno, después de que asuma el próximo gobierno, posiblemente que sea la fórmula puntera los Fernández, ¿con qué crees que se va a encontrar el nuevo gobierno en la economía?
Día uno, lo primero que hay que hacer es pedirle al Congreso que declare la emergencia social, alimentaria, parar la desconexión de los que no pueden pagar la luz, el agua, la universalidad de los derechos a los alimentos de las personas, y tenemos que ir a negociar con el FMI con una valija integral de propuestas, donde demuestre que el proyecto es nacional y popular con política sociales, el sistema de reparto de la ANSES, que proteja a los trabajadores, pero cómo lo vamos a hacer de manera sostenida financiándolo en el tiempo.
Eso seguramente incluye que las personas que hicieron el blanqueo y tienen bienes en el exterior paguen una alícuota diferente en bienes personales, que incluya un destino determinado de impuesto a las exportaciones o retenciones, y limitar la fuga de capitales, evitando que el país pague más impuestos. Hay que ir con un esquema real de redistribución de las riquezas.
Lo que estamos diciendo es que hay que redistribuir para crecer, ponerle plata en los bolsillos a la gente, garantizar que la clase media pueda seguir consumiendo y es la única manera de que el país tenga futuro”-concluyó Rossi.