Milei desembarcó en la FIT 2025 para apuntalar el turismo y su narrativa presidencial.

Por Margarita Pécora y Claudia Bustamante –
Javier Milei no se pierde un solo escenario, aunque esté «pasado por agua». Después una gira por Estados Unidos que le dejó el respaldo explícito de Donald Trump y un nuevo acuerdo con el FMI como carta de navegación económica, el libertario tomó aire y pisó el predio ferial de La Rural.
Esta vez, el escenario fue la Feria Internacional de Turismo de América Latina, donde encabezó el acto de apertura del evento más importante del sector en la región, con un discurso escueto y triunfalista, sin políticas concretas para un sector en franca caída.
Con su presencia, Milei no solo buscó apuntalar un sector golpeado por la crisis económica, sino también reforzar su narrativa de liderazgo, mostrar cercanía con el mundo productivo y capitalizar cada espacio público como plataforma política.
Rodeado de figuras clave de su gabinete y ante una audiencia que mezcla empresarios, funcionarios y referentes internacionales, el presidente convirtió la FIT en un nuevo capítulo de su campaña de cara a octubre.
No fue casual ni protocolar que estuviera allí donde se reúnen los exponentes del mercado del ocio. En medio de una economía que aún se tambalea, con un turismo golpeado por la falta de competitividad, el presidente eligió mostrarse, como parte de su estrategia de reforzamiento político y económico en vista de que los números del sector revelan una caída alarmante.
Según datos del INDEC, en agosto 798.400 argentinos viajaron al exterior, mientras que apenas 397.500 turistas extranjeros ingresaron al país. El saldo negativo fue de US$ 371,9 millones, una cifra que expone la urgencia de políticas activas para revertir la tendencia. Brasil, históricamente el principal mercado emisor, mostró una caída interanual del 13%, lo que agrava aún más el panorama.
En ese contexto, la FIT 2025 es el escenario para relanzar la imagen de Argentina como destino turístico global y, al mismo tiempo, para reforzar la narrativa presidencial de que el país puede salir del fondo. “El turismo es una herramienta poderosa para generar empleo, divisas y desarrollo federal”, repiten desde el entorno de Milei, que busca capitalizar cada espacio público como plataforma de gestión y campaña.
Acompañado por figuras clave como su hermana y Secretaria de la Presidencia, Karina Milei, Daniel Scioli, Patricia Bullrich y Guillermo Francos, el presidente encabezó un acto que pretendió dejar el mensaje de que Argentina quiere volver a estar en el mapa, y el turismo puede ser uno de sus motores.
En contraste con el protocolar acto de inauguración encabezado por Milei, la verdadera energía de FIT 2025 se vivía en los pasillos . Mientras en el escenario se desplegaba la formalidad institucional, el público recorría los pabellones con curiosidad y entusiasmo, admirando la diversidad de propuestas turísticas de las provincias argentinas y de países invitados.
Brasil, con su inconfundible zamba, colorido y alegría, se robó las miradas en un stand vibrante que parecía latir al ritmo de la música. A pesar de la lluvia persistente, los visitantes no se amedrentaron: llegaron en gran número, dispuestos a disfrutar de la experiencia. Las largas filas en muchos stands daban cuenta del interés por participar en sorteos, juegos interactivos, degustaciones de comidas típicas y espectáculos en vivo.
Cuba y Brasil, entre otros, aportaron ritmo y sabor a la jornada, convirtiendo la feria en una verdadera fiesta multicultural. La FIT 2025 fue, más allá del acto oficial, un espacio donde la gente se conectó con el turismo desde el disfrute, la emoción y sobre todo la esperanza de volver a viajar como antes lo hacía.