JAVIER SOUZA: “No somos capaces de reaccionar a tiempo a las primeras señales del cambio climático”

Por Rodrigo Marcogliese –
Javier Souza Casadinho es ingeniero y docente UBA. Al pedirle detalles sobre la preocupación por los drásticos cambios que se operan en el clima en diversas partes del planeta y generan desastres para la humanidad, el especialista fue rotundo al considerar que “Asistimos a cambios profundos del planeta, provocados por nuestras actividades, y que no somos capaces de reaccionar a tiempo a las primeras señales del cambio climático”.
Estamos viendo a nuestro alrededor, desde el problema de la escases de agua potable por la extrema sequía en Uruguay, pasando por los incendios en Europa donde se registró este mes como el más caluroso en los últimos años… ¿Qué es lo que está pasando en nuestro planeta?
“Todos los fenómenos tienen sus particularidades – explicó el especialista, pero todos a lo mejor tienen una raíz común, que es el cambio climático que explica por qué no llueve en algunos lugares, hay profunda sequías acompañada después con una muy baja humedad lo que propicia los incendios. Asistimos al Julio más caluroso el planeta y toda la historia; lo vimos en Buenos Aires el verano pasado con la profunda sequía, todo tiene que ver con algo que tiene su mapa genérico de cambio climático y que implica, cómo los seres humanos a partir de acciones concretas, tecnología concreta, de prácticas, fuimos modificando, primero paulatinamente en los últimos años de manera muy acelerada el clima en el planeta que vivimos, que es el único que tenemos.
Souza recordó que antes se refería a los cambios climáticos con la frase “tiempo loco”, “lo que vemos que el clima en realidad es algo más profundo y está cambiando, estamos viendo que la tierra durante el día recibe los rayos solares, se va calentando el planeta, todas nuestras actividades, las plantas viven, los animales vivimos gracias a temperaturas que son agradables, etc.
Durante la noche pasa un fenómeno inverso que no percibimos tan claramente, que es que la tierra se enfría ,va enviando energía hacia la atmósfera, un proceso que se llama la inversión nocturna .Lo que está pasando ya desde hace casi 100 años es que se fue creando alrededor de la tierra en la atmósfera, una capa impermeable, por el efecto invernadero, como si fuera un plástico alrededor de toda la Tierra, que evita que la esa radiación nocturna se vuelva de atmósfera, y eso rebota en contra de estos gases y hace que las temperaturas en la tierra vayan aumentando. Y la tierra se calienta y reclaienta cada vez más.
También el experto señaló:
“Además de estos bruscos cambios de temperatura y las lluvias que vemos son aleatorias, a veces llueve 10- 15 días seguidos en algunos lugares del planeta, a veces tenemos vientos huracanados en algunas zonas, cambios también en las corrientes marinas (escuchamos hablar de la Corriente del Niño y de la Niña). Todo eso hace que asistamos a profundos cambios provocados por esos gases de efecto invernadero – reiteró- y no son algo ocasionado por la naturaleza, sino tienen que ver con nuestras actividades- apuntó- y puso de ejemplo el dióxido de carbono que emiten los autos.
En otra parte de su charla con Comunas, Souza reflexionó de conjunto sobre la falta de previsión de los fenómenos donde son convocados a los científicos a hablar de lo ya ocurrido, pero casi nunca de lo que va a ocurrir.
“Es cierto, los seres humanos muchas veces no somos capaces de reaccionar a tiempo a las primeras señales del cambio climático”; e hizo referencia a un investigador que hace 123 años atrás empezó a plantear el tema de cambio climático. “Parecía como un fenómeno que no iba a llegar nunca. Y hoy lo tenemos presente”.
“Los seres humanos muchas veces no somos capaces de prever los cambios en la naturaleza, y anticiparnos a las situaciones, como algo que sí puede ver la gente del campo en el interior.
También el académico se refirió a las corrientes marinas, “van modelando el clima también producto de los cambios en la temperatura; hablar de la rotación las estaciones marinas de alguna manera implican , muchas cuestiones que tienen que ver con la vida , desde la pesca para los pueblos que son Pescadores, desde las temperaturas del agua, en las temperaturas atmosféricas que inciden en el crecimiento de los vegetales, la calefacción de las construcciones, justamente en viviendas en las grandes ciudades, o en lugares a lo mejor muy fríos en determinada época del año
“No somos capaces de anticiparnos a situaciones que van a suceder cuando se dan las primeras manifestaciones, y la segunda es que los cambios en las corrientes marinas implican bruscos cambios después en la vida en el mar, en la vida en la tierra y obviamente sobre los seres humanos, que somos uno de todos los seres vivos en el planeta Tierra” –resumió Souza.