Y LA RATA ¿DÓNDE ESTÁ?

Por Gabriel Princip.
Desde este espacio siempre se dijo que el poder de Cristina Fernández culminaba cuando el presidente fuera elegido. Se entregaron votos peronistas para que gobernara una Colación Liberal-Radical. Alberto y Sergio más Kulfas liberales, Guzmán radical al igual que Santoro y otros acólitos. Mala elección, pésimo gabinete, horrible ministro de economía.
También desde este espacio se dijo que Martín Guzmán solo aportó a la causa popular el ingreso de una periodista a C5N. El joven platense recorrió el planeta durante dos años para acordar con el FMI. Un acuerdo pésimo y en el peor momento de los Estados Unidos, país que comanda el FMI.
Esta rata sabía que el beneficio era para el Fondo, de una deuda ilegal y hasta la misma corporación reconoció que se habían equivocado, sin embargo, el bueno de Martín blanqueó la deuda de Macri. Si señores, porque eso fue, y eso provocó el enojo todo de los K.
La rata huyó y dejó en banda a la economía y a los 47 millones de argentinos. Nadie lo menciona, nadie lo busca, pero el principal responsable de la debacle del país es esa rata, la rata joven, la rata radical, la rata que eligió Alberto, la rata que conoció el planeta con plata nuestra, la rata que se esconde, en síntesis, la rata que siempre trabajó para el enemigo.
Hoy ya no sabemos donde estamos parados. El presidente nunca tuvo conducción política y nada se le puede pedir ahora. La vice no sabe qué hacer, si acompañar una futura renuncia, si asumir o viajar a Europa. Nadie sabe nada, el golpe del mercado continua y los argentinos asistimos a la devaluación del salario. Los empleados han licuado su sueldo y los dueños de pymes no pueden trabajar porque el dólar que se utiliza en la compra de elementos para trabajar no es el dólar solidario sino el paralelo, y nunca el gobierno corrigió esta cuestión.
Alberto solo cortó cintas, se hizo amigo de Larreta y Morales y dejó en prisión a los compañeros y en libertad a los saqueadores, además de permitir la huida de la rata que ya había consumido el queso. También desde este espacio dijimos en el 2019 que el proyecto del sistema era desaparecer de la política a Cristina, y lo están logrando. No son inocentes el presidente y Massa. También dijimos que el virus fue un accidente de laboratorio nunca natural, y la biblia de la medicina, la revista Lancet informó que este espacio tenía razón. O sea nunca mentimos, no hacemos auto profecías, sino que no comemos vidrio ni confiamos en liberales que nos quieren hacer creer que son compañeros. ¿No le parece?




