TRAGEDIA GRIEGA

Por Carlos Galli.
La recientemente nombrada Ministra de Economía, Silvina Batakis viene del PJ.
Dicen los que saben, que es progresista de izquierda.
Que pretende y aspira, algún día, ser Presidente de Boca Juniors, según sus dichos en un programa partidario de C5N, a Gustavo Sylvestre, desde hace algún tiempo converso al kirchnerismo, aunque siempre fue un radical alfonsinista.
La nueva Ministra laburaba para Daniel Scioli en la Provincia de Buenos Aires.
Allí tuvo su primer fracaso.
Es de suponer que ahora que maneja la economía del país, pueda revertir sus fracasos en épocas sciolistas.
Tiene ante sí una enorme responsabilidad, enfrentar con uñas y dientes a los buitres del FMI, que le van exigir el oro y el moro, y no debería ceder ni un tranco de pollo.
Entre la economía de los mercados y la economía popular, por su ideología, debería estar alejada del capitalismo salvaje.
Pero nunca se sabe.
Es un tiro al pichón, como dice un dicho popular.
¿Será pronto un fusible, o su ideología progre es la solución a los serios y graves hechos de nuestra economía micro y macro? Un «ortodoxo» nos hundió en el abismo más profundo. Espero que la flamante Ministra, no nos hunda en los siete infiernos del Dante.
El país está en llamas. Los precios descontrolados. La inflación sube por los ascensores, y los salarios están en el sótano, y suben en cámara lenta por las escaleras.
Los planes sociales están manejados por los gerentes de la pobreza, algo que debe solucionar, más temprano que tarde.
Los grandes super e hiper mercados, están desabastecidos o acopiando mercadería, algo que los empresarios y las corporaciones y en especial las multinacionales, siempre piensan en sus propios beneficios, sin importarle el Pueblo, del que viven alejados porque no les interesa el bienestar general, sino el propio.
No quiere que viajemos al exterior. Aunque ella, tiene a su hijo adolescente en Londres.
No nos tome por idiotas usted también, ya bastante nos maltrataron y maltrata el primer mandatario y la vice.
La «elegida» no tiene espalda política y el apoyo popular, en lo personal lo desconozco.
Responde a la Vicepresidente de la Nación, pero la nombró el Presidente, y parte del albertismo o lo poco que queda de sus seguidores.
Entonces cabe preguntarse ¿A quién responderá?
Si al núcleo duro del cristinismo kirchnerista, o a los tibios del albertismo, cada vez más tibios y cada día con menos poder.
Para terminar, finalizo diciendo:
Espero por el bien del Pueblo, que no sea una TRAGEDIA GRIEGA.




