EL PODER DE LA BIC

Por Gabriel Princip.
Se ha convertido en un clásico, habla Cristina con el presidente cerca y un Ministro por lo menos es eyectado del perezoso, lento e ineficaz gabinete que acompaña a un ejecutivo preocupado más por llegar al 2023 que por gestionar.
Una característica de Néstor fue que jamás usó una lapicera de oro ni de plata. Siempre llevaba una Bic común azul en su bolsillo interior. Cristina supo utilizar su lapicera en dos gestiones. Jubilación de Ama de Casa, Futbol para Todos, todas las vacunas, plan Procrear y un dólar bajo. Cristina cumplió al igual que su marido con la utilización y el poder de la Bic.
La última presidencia Cristina recogió sus votos y los cedió a Alberto para que pueda gobernar cuatro años. Claro que apenas asumió el actual presidente se acabó el poder Cristina pues la Bic se la apropió Alberto.
Cristina ocupa un rol de vicepresidente, o sea toca la campana en el senado, mantiene su público con discursos que se traducen en remeras pero no puede gestionar. Esa tarea la trata de cumplir el hombre de la foto más cuestionada de la historia.
No obstante, el poder interno, el de los votos sigue en manos de la platense. Por eso en la última aparición conjunta hizo uso de ese poder a través de las cámaras. El publico agolpado en Tecnópolis con la excusa del cumpleaños de YPF fue testigo del valor de la unidad.
Ante el reclamo de Cristina, “use la lapicera presidente” y ante la tonta defensa del Ministro de Producción sobre su escasa gestión, Alberto no tuvo alternativa. Conservó la unidad otorgando una Bic a Kulfas para que firme y entregue su renuncia.
El titular del ejecutivo otorgó paz, claridad y le dio una mano a la unidad promoviendo a Daniel Scioli en el gabinete. Sin querer Kulfas ayudó al matrimonio Fernández. Scioli debía entrar en el gabinete para visibilizarse y desde ese lugar tener la posibilidad de disputar las PASO. Sergio Massa dejó el espacio, Máximo no se tiene fé, Axel no quiere, entonces muchos nombres no quedan para disputar el sillón de Rivadavia a la derecha. Una fórmula puede encabezar el deportista o bien acompañar a Cristina.
Tecnópolis fue el final de Kulfas y la reaparición de la Bic. La misma lapicera que uso Néstor, Cristina y que esta le pidió a Alberto que le otorgue utilización. Con la Bic le dio la orden a Guzmán para que presentara el proyecto de Renta Inesperada, un impuesto que afectará aquellas empresas con ganancias mayores a 1000 millones anuales y que le cedió a Kulfas para que firme su renuncia.
La Bic más útil que nunca. Un antiperonista dejó el gabinete y otro no peronista firma un proyecto para que los conservadores colaboren con la crisis argentina. Para el próximo discurso de Cristina en público encontrará al gabinete entero rezando para salvar la cabeza del poder de la Bic. ¿No le parece?




