LA SANGRE INSULTADA
Por Carlos Galli.
La secta Camporista y el Kirchnerismo más berreta, el pasado jueves 24 de marzo, pisotearon la sangre de aquellos COMPAÑEROS y COMPAÑERAS que murieron para que la Patria VIVA.
Ustedes, hombres y mujeres militantes de la mencionada secta conocieron la maldita ESMA como museo. A quienes pisotearon la sangre y la memoria de miles de militantes del campo popular les digo, el 24 de marzo le faltaron el respeto. Se cagaron en sus ideales y en sus convicciones. Y hasta se cagaron en desapariciones, en las torturas y en la muerte.
Cuando esta nota de opinión se publique, hoy lunes faltaran 631 días para que se vayan.
Hicieron todo mal. Comenzando por la vicepresidenta de la Nación que fue quien eligió a un tibio, a un hombre sin sombra, a un hombre gris, a un socialdemócrata para que la acompañe en la fórmula como número uno.
Mancharon la memoria. No había una sola bandera ARGENTINA en la marcha sectaria encabezada por el heredero de la herencia, NO heredero de los ideales populares que dice y cree representar. La gente no es parte del gobierno como expresó. El pueblo está con hambre, sin laburo. Compatriotas que no tienen agua potable, ni cloacas.
Muchachos y muchachas, ustedes y el kirchnerismo berreta NO son los dueños de los DERECHOS HUMANOS.
El Día de la Memoria es de todos los argentinos de buena leche. Es de los que pusimos el pecho para que ustedes puedan vivir en democracia y en un Estado de Derecho.
La sangre derramada no será negociada, era nuestro himno de guerra. Ustedes el jueves pasado la bastardearon, la pisotearon. Hasta sentí que se burlaban de esa sangre cuasi sagrada.
Cantitos infantiles. Burlescos, una fantochada cantar que ustedes son los soldados de Perón. Hipócritas. Jamás pondrán el cuerpo y nunca derramarán una gota de sangre por el pueblo. Sus ideales y sus convicciones son las cajas millonarias que manejan, es lo único que los retiene, porque si no las tuvieran les importa un carajo que se pudra todo. Y no lo pudren porque aman el DINERO, que como dice La Santa Biblia «es la raíz de todos los males». A los viejos perucas no nos llevaban en micros, llegábamos a la mítica Plaza de Mayo por convicciones e ideales nobles. Honestos. Con errores y aciertos pero era una militancia pura. Las bases eran nobles, no íbamos detrás del billete. Hasta diría que éramos idiotas útiles. Los garcas eran los de arriba. Los que hasta transaron con los genocidas, entregaron a Compañeros y COMPAÑERAS a cambio de permanecer vivos y poder exiliarse como ratas.
Insisto, la secta Camporista el jueves 24 de marzo manchó la MEMORIA, LA VERDAD y LA JUSTICIA.
