EL PERONISMO NO PERDIÓ
Por Carlos Galli.
La mayoría de los colegas comunicadores sociales, expresaron y siguen opinando, que el 12 de septiembre pasado el peronismo sufrió la derrota más grande de toda su rica historia.
Se equivocan de cabo a rabo. ¿Por qué? Simplemente, porque el peronismo no participó en las elecciones de las PASO. Participó una coalición gobernante, que nada tiene que ver con la doctrina occidental cristiana y humanista, que fundara el General Perón. El peronismo no fue derrotado en las urnas. No hubo ni listas, ni candidatos del tronco del peronismo histórico. De la Justicia Social, de la Soberanía Nacional, de una economía popular de mercado.
Las fórmulas y los candidatos lejos están del peronismo auténtico. Del revolucionario, como lo quería nuestra entrañable Evita.
En la Ciudad de Buenos Aires, se presentó un radical alfonsinista, más cerca de la social democracia que del peronismo. En la Provincia de Buenos Aires, la primera candidata, fue una concheta de Puerto Madero. El segundo pre candidato, Daniel Gollán, un sanitarista tibio, sin una ideología definida. Que, en plena pandemia aterrorizó al pueblo, diciendo que iba a haber cadáveres en camiones frigoríficos.
El kirchnerismo no es peronismo, y mucho menos el Cristinismo. Son una mezcla de oportunistas y serviles, que van y vienen de derecha a izquierda según les convenga a sus propios y egoístas propósitos personales.
Los colegas se equivocan, el peronismo no perdió porque no participó. Al peronismo lo «proscribieron», lo «prohibieron». Y se encargó de hacerlo el kirchnerismo, La Cámpora una secta que se auto titulan revolucionarios, que debaten la revolución social en el Café Tortoni. Creen ser los nuevos Montoneros, o se sienten que son aquella gloriosa JP de la Tendencia. Son solo simuladores. Máximo Kirchner, está a años luz del Canca Gullo. Nadie en su sano juicio, puede comparar a Victoria Donda, o a Tolosa Paz, con ninguna militante de los años de plomo. Aquellas que pagaron con su preciosa sangre, para que la Patria VIVA.
Hasta un reciente nombrado ministro, nos dijo «que nos metamos la Marcha Peronista en el cu..» ¿Se acuerda quien lo expresó?, Aníbal Fernández, quien muchos creen que es Esteban Righi. Tiene que nacer de nuevo y atarse los cordones de los zapatos.
A Santiago Cafiero lo desplazan, y lo premian dándole la Cancillería a quien tiene menos calle que Venecia.
Cambiaron medio gabinete, creyendo que lo peronizaban. Un nuevo error. Nada cambia. No hay nada nuevo bajo el sol.
Basta señores y señoras de los medios hegemónicos. El peronismo no sufrió ninguna derrota electoral el domingo 12 de septiembre. No se puede derrotar a quien no participa. Perdió la coalición de gobierno, que claramente, no es peronista. Es como un enorme panal de abejas, con una abeja reina y cientos de zánganos, que, como tales son poco útiles a las causas populares.
No es con dádivas cómo van a dar vuelta una elección, es con PERONISMO, de otra manera seguirán naufragando en las aguas de la incertidumbre y el descontento de un pueblo que hace tiempo que extraña al peronismo.
