Licencia parental: La ley que pone a Catamarca a la vanguardia en derechos de familia

A la espera de su promulgación, la ley impulsada por la diputada Adriana Díaz (PI- FdT), ubica a la provincia al frente en el otorgamiento de un derecho que es reclamado en otras provincias, e incluso países de la región. De qué se trata el nuevo régimen de licencias igualitario y superador de los roles de género.
En Argentina las licencias por maternidad y paternidad reproducen estereotipos de género e invisibilizan la diversidad de las constituciones familiares. Para la Administración Pública Nacional, la ley 25164 dispone una licencia por maternidad de 100 días, mientras que el decreto 214/2016 otorga una licencia por nacimiento de 15 días hábiles para la persona no gestante.
Sin embargo, en Catamarca, el “Régimen de licencia parental para agentes de la administración provincial” promovido por Adriana Díaz, equipara los derechos y obligaciones en cuanto al cuidado de los hijos. En principio, reemplaza y unifica los términos de “Licencia por maternidad” y “Licencia por paternidad”; equipara e incluye al suprimir el término de conyugue por conviviente; otorga la misma cantidad de días de licencia posnatal o por adopción de ambos cuidadores parentales.
La ley indica que no deben existir diferencias en el tratamiento legal cuando hablamos de adopción o de familiar responsable de los cuidados parentales. Esta es una de las tantas maneras en las que una persona puede convertirse en madre o padre. También contempla aspectos como licencia por período de alimentación, es decir, que no habla solo de lactancia.
La legisladora detalló que la norma “tiene como objeto crear un régimen de licencia parental que equipare las licencias por cuidados para las personas que sean padres, madres y/o que tengan la crianza de niñas, niños o adolescentes. Ya no hablamos de licencia por maternidad o paternidad, sino de parentalidad”, agregó.
Díaz explicó que se dio “un tratamiento integral y con miras a la deconstrucción de patrones socioculturales estereotipados, con el objetivo de ir eliminando progresivamente prácticas basadas en prejuicios de género que atrasan y coartan derechos que necesitan ser visibilizados”.
La ley aprobada por la legislatura catamarqueña está a tono con la legislación de los países nórdicos, y la que promueve organizaciones de nuestro país como el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC).
Según el CIPPEC, “una licencia coparental, que distribuya equitativamente los días para cuidado entre madre, padre y otros adultos, facilitaría el retorno de las mujeres a sus trabajos, contribuyendo a su autonomía económica, a la reducción de la brecha salarial entre varones y mujeres, y a una distribución más justa de roles al interior del hogar. A su vez, al aumentar la cantidad de mujeres que trabajan, promovería el desarrollo y contribuiría a que las familias salgan de la pobreza”.





