Actualidad del trabajador pesquero

Entrevistado en el programa radial Matices del Puerto, el Secretario General de Capitanes de Pesca se refirió a diversos temas de la actualidad pesquera nacional, entre ellos, paritarias y la nueva forma de pescar que impone la flota fresquera, el impulso al tratamiento de las adicciones abordo, los inconvenientes que sufriera en navegación el B/P «Pensacola I» y la interacción con Prefectura.

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En unos diez minutos de entrevista, el Secretario General de la AACPYPP abordó diversos temas vinculados con la actualidad del sector, desde la óptica de los trabajadores.
En principio la periodista se interesó por como se sucedieron las cosas respecto del B/P Pensacola I que a principios de mes, a raíz de las malas condiciones del tiempo, se dirigía a puerto para resguardarse y «sufrió una rotura del eje de transmisión del buque con lo cual quedó sin propulsión», señaló Jorge Frías agregando que «una de las FM que nos contactara del sur nos preguntaba en qué condiciones estaba la tripulación abordo, y obviamente desde el desconocimiento pensaban que el buque estaría sin luces, sin ningún tipo de servicio, y explicabamos esto, que el buque mantiene en marcha sus motores auxiliares, y bueno lo fundamental es que el buque tenga una estanqueidad correcta para soportar cualquier contingencia marítima, después obviamente que en un mar agitado, con vientos de hasta 100 km. no se la pasa bien, pero de ahí a que haya una emergencia de naufragio, tanto el capitán como la tripulación están preparados para paliar la situación de distintas maneras».

«Nosotros a conciencia sabemos que estamos enfrentando la naturaleza -agrega-, vamos por una retribución salarial mejor y corremos los riesgos que queremos correr, y quienes dejamos en nuestros hogares también son concientes de esta situación, pero al momento que se prende una alarma todas estas cosas se magnifican. Lo importante es que los buques mantengan la estanqueidad que tienen que tener y que las tripulaciones tengan la capacitación y preparación que tienen que tener y esto hace que cualquier contingencia se supere de la mejor manera».

«Quiero apuntalar un poco, porque siempre a la Prefectura tenemos cosas para decirle, de hecho ahora estoy pidiendo una reunión importante para tratar temas de sumarios, el alto costo de multas y otras cuestiones, pero la Prefectura presta la asistencia necesaria, obviamente que el momento preciso para transmitir la información transcurre, entonces la Prefectura asistió al buque, así me lo expresó el capitán más allá de alguna que otra demora, porque hay que ponerse en situación y evaluar que el temporal es para todos, no sólo para el buque que está en conemergencia, pero esta foto parece que no se vería porque tomar remolque en una situación de ese tipo tampoco es una tarea fácil y son los capitanes, tanto del buque que está en emergencia como del que va a asistir, los que tienen que tomar la decisión si es conveniente o no para tomar ese remolque, porque hay marineros que tienen que salir a buscar los cabos, no es tan simple, así que también vale para mí reconocer que la Prefectura asistió en tanto y en cuanto se pudo», dijo.

Periodista- Hablando de situaciones abordo, uno recuerda lo sucedido en épocas pasadas con tripulaciones extranjeras en nuestro mar y la relación que se mantenía entre la dotación de seguridad y el personal de marinería de otros países, ¿cómo se encuentran frente a los poteros autorizados por parte del Gobierno Nacional con proveniencia desde China? ¿qué esperan ustedes?

Jorge Frías- Las tripulaciones argentinas ya tenemos una experiencia distinta a la que en aquel entonces, cuando comenzó esta transferencia de mano de obra extranjera con buques extranjeros, tanto capitanes como marineros y conductores estamos preparados para convivir con estos trabajadores, cada uno tiene sus costumbres, y por aquel entonces había muchos desentendimientos, pero hoy entiendo que todos los trabajadores que desarrollan sus tareas en los buques poteros tienen una experiencia como para manejar esta situación y obviamente que quienes vengan también tendrán la preparación para una buena convivencia, por lo menos entiendo no debería haber mayores inconvenientes en trabajar.

Han pasado muchos años, incluso actualmente se trabaja con capitanes o garantías, hay empresarios que todavía recurren a los que se denominan «pescas» extranjeros que vienen de la mano de algún oficial, de algún cocinero, entonces la convivencia no es que se cortó absolutamente, hay todavía buques que se tripulan con personal extranjero.

P.- En tierra siempre llegan determinados comentarios con respecto a que hay ciertos resquemores entre unos y otros.

J.F.- En tierra siempre hay una suerte de fantasía en cuanto a lo que pasa abordo de los buques que no pueda pasar en tierra, y la verdad es que somos personas iguales y que llevamos la vida más allá de lo duro del trabajo, incluyendo el sedentarismo al que nos vemos obligados por estar encerrados en un barco, la conductas tienen que ser parecidas a las que se tienen en tierra.

P.- Fantasía no son tus declaraciones acerca del consumo de drogas en diferentes embarcaciones, hablando justamente de que no son concidiones naturales las que se llevan a cabo arriba de un barco.

J.F.- No es solo que me refería a drogas sino también al alcohol. Es una preocupación que me transmiten los propios compañeros capitanes en actividad y muchos que se retiraron, y también muchos compañeros marineros, lo que transmití es una preocupación que es cierta, que nadie puede negar, entonces existe, la vida abordo tiene un paralelismo con lo que se hace en tierra, si hay alguien que tiene una adicción en tierra y sale a navegar la va a seguir teniendo, esto es lo que hay que atender, y sin que se ofendan las autoridades, no se trata de ponerse la gorra, sino de atender una cuestión que es preocupante, que no es exclusiva de la marinería, acá está toda la tripulación involucrada, y toda la sociedad, esta es la cuestión.

P.- Entendido esto, ¿de qué manera se está abordando?

J.F.- No hay ningún planteo de instaurar nada ni obligar a nada. Es una preocupación interna, nuestros compañeros pierden la fuente de trabajo en algunos casos porque esto trae consecuencias laborales, donde en algún buque se sucede una situación de éstas, el capitán pretende corregirla y al no poder hacerlo pide el desembarco de uno, dos o tres tripulantes y al final tiene que terminar perdiendo su trabajo él, porque la empresa no va asumir el costo de desvincular a tres compañeros y obviamente el capitán no puede manejar la tripulación y se tiene que ir, termina dejando el trabajo, o sea que la consecuencia no es solamente un problema de adiciones. Ahora, quiero ser claro en esto, nosotros empezamos a tratar el tema para nosotros sin que afecte a nadie y estamos tratando de desarrollar algún tipo de taller, algún tipo de atención con profesionales, y con carácter optativo, lo que más queremos es no ver pasar la cuestión por delante nuestro y no hacer nada.

P.- Para obtener la libreta se necesita un examen psicofísico

J.F.- A partir del año pasado surgió un examen psicofísico, que es complementario al físico. La situación es compleja, con este tema he tenido algunos rebotes y me he enterado por ejemplo que una empresa automotriz de las más importantes de Argentina es la que tiene el porcentaje más amplio de adicciones, o sea que la sociedad está atravesada, no es solamente la pesca. (…) Estamos hablando de quienes construyen los autos que después manejamos, nosé donde está el punto para atender realmente, si un tipo de adicción afecta realmente a realizar una tarea o no, no es el debate que yo traté de plantear, lo que sí tengo preocupaciones para algunas personas que yo aprecio y quiero y tienen este problema, obviamente dentro de la actividad, nació tratar de estrecharle una mano

P.- Supongo que en el trabajo automotriz se tomaran ciertos recaudos, y además es un trabajo en tierra, insiso con esto el trabajo abordo, el trabajo en el mar no es sencillo, hay un capitán que debe manejar, debe tomar las decisiones y debe manejar una tripulación en el medio de la nada vamos a suponer, estamos hablando de gente manejando gente, y que si se cruzan este tipo de adicciones se transforma realmente en un problema grave que necesita un serio debate.

J.F.- Podríamos llevar el psicofísico al Senado también. Es mucho más grande y compleja la problemática.

P.- Tema paritaria, cómo andamos?

J.F.- Nosotros hemos acompañado los porcentajes que se ha podido, en la flota fresquera hemos alcanzado el 28% que se le otorgó a todos los gremios, el escenario político hace que tenga este resultado, esto es lo que hay, no hay más y sino el conficto, y bueno nuestra premisa fue conservar los puestos de trabajo porque creíamos que era el camino correcto para afrontar este 2014 pero volvimos a tener una trastada del sector empresario con respecto a que no sacó los barcos a trabajar, estuvo haciendo un viaje por mes, por más que traten de decir que esto no es así, nosotros tenemos contacto permanente, hemos recorrido el puerto y permanentemente está con muchos barcos, la foto es clara, todos los gremios han sostenido esto y estamos considerando que eso ha afectado el convenio que firmamos con lo cual ha lesionado gravemente nuestra obra social y para decirlo también con la anuencia de los propios compañeros, de algunos no digo todos, que se han prestado a estas cuestiones de no reflejar todo lo que producen en el recibo de sueldo, de realizar un viaje solo.

P.- El número que cerraron en paritaria, lo cerraron con la condición de que los barcos salieran, por lo menos tuvieran dos o dos viajes y medio como anteriormente?

J.F.- Lo que pasa que eso fue el origen del convenio que firmamos en 2011, cuando lo discutimos, despues de muchos años de discutir con la cámara, basamos el convenio sobre dos viajes, dos viajes y medio, entonces esto hacía que la representación en el recibo de sueldo de los compañeros sea significativa y cuanto menos le de el resguardo de la cobertura de salud que es lo que más nos preocupa, cumplir con esa obligación que tenemos.

P.- Y este año volvieron a plantear la misma condición?

J.F.- No, nosotros pretendimos y pretendo, si esto va a seguir siendo así, se lo dije al ministro cuando nos reunimos en el INIDEP, al Ministro Casamiquela cuando nos convocó a esa reunión, le dije ya habíamos tocado este tema y que había una nueva forma de pescar producto de la aplicación de la cuotificación, cuestión con la cual tampoco estuvimos de acuerdo con la manera en que se hizo, y si había una nueva manera de pescar nosotros sostenemos que queremos tener queremos tener un salario básico que no sea absorbido por la producción, porque tenemos un salario básico que a lo largo del año se aplica muy poco, en circunstancias especiales, porque en el primer viaje este salario básico se ve absorbido por lo que se produce y ya está, no se percibe, entonces bueno, si vamos a hacer un solo viaje, queremos cobrar un salario básico más la producción. Esta forma de desarrollar la tarea la cambiaron ellos de acuerdo a sus necesidades o conveniencias. Hoy hay que decir que el empresario apuesta más al producto congelado, lo cual genera menos trabajo en tierra obviamente, para ellos tendrá menos costo seguramente por eso lo hacen, lo mas práctico, menos costo, más conveniente lo cierto es que nosotros tenemos que rediscutir la cuestión salarial entonces si ellos van a trabajar de otra manera. Igual para cerrar esta idea, te digo que cerramos un 28% de algo que no sabemos que vamos a producir, esta es la realidad.

P.- Una cosa es estar arriba de un langostinero y otra de un merlucero, se nota muchísimo la diferencia.

J.F.- Un poco siempre fue así. La cuestión está en el precio del producto, nosotros realmente no sabemos el valor real de lo que estamos produciendo, entonces tenemos que figurar valores inventados y aparece la AFIP aplicando un FOB y no cierra, y decimos bueno vamos a ponernos de acuerdo en un número nosotros tampoco cierra, bregamos por el Mercado Concentrador de Pesca, tampoco cierra, entonces en este desorden lo que siempre falta es el consenso entre las partes y determinar un valor que sea conveniente para todos, una movilidad porque trabajamos un producto que hoy hay, mañana hay un poco menos, donde hoy se consume, en un mes se consume menos, así dependemos en mayor parte de la exportación y el consumo de países que no es la Argentina justamente, pero bueno todas estas variables hay que entenderlas pero hay que escribirlas también, y sino estamos al antojo de lo que ellos quieran pagar.

P.- ¿Qué futuro le ves a la pesca nacional?

J.F.- Sin ningún tapujo puedo decir que hace 30 años que estoy en esta actividad, los empresarios que de alguna manera fundaron masivamente la industria fresquera que claramente son, por lo menos en Mar del Plata, Solimeno, Valastro y Moscuzza, para tomar algunas referencias, ya no son los mismos empresarios ellos fundaron sus empresas con el producto fresquero han mutado al congelado, obviamente y tienen su derecho, pero esto lamentablemente yo no lo veo bueno para el futuro de la industria, porque no hay un desarrollo que mire el futuro sino es capturar todo lo que se pueda ahora de la manera más conveniente y después no sabemos si estos empresarios referentes tienen la estructura preparada como para que sus empresas continúen en el tiempo, porque se han magnificado, han crecido muchísimo.

P. – Capaz que el futuro viene de la mano de los chinos, porque de acuerdo a las declaraciones últimas ellos apuestan al agregado de valor, apuestan a generar trabajo en tierra así que posiblemente venga de ese lado.

J.F.- Los chinos son muchos así que se puede esperar cualquier cosa. (risas)